Economía

¿Qué son los préstamos preconcedidos?

Puede que, alguna vez, a alguno de nosotros nos haya llegado alguna carta o llamada de una entidad financiera en la cual se nos ofrecía un “préstamo preconcedido”. Normalmente, somos los clientes quienes, ante una necesidad de financiación, nos dirigimos a la entidad financiera para solicitar un préstamo o crédito. En este caso, ocurre al revés: es la entidad financiera quien ofrece a alguno de sus clientes la posibilidad de acceder a un préstamo.

Ahora bien, no todo el mundo es beneficiario de ellos. Solamente se ofrecen a aquellos clientes de una sólida posición financiera y capacidad adquisitiva, con un riesgo de impago muy bajo. En ese sentido, puede parecer contradictorio: se ofrece financiación a quien no la ha pedido (y tampoco precisa con urgencia), pero se ponen muchas dificultades a aquellos emprendedores o pymes que quieren iniciar o incrementar su actividad.

¿Cómo funciona la concesión de este préstamo?

Los preconcedidos se ofrecen solamente a aquellas personas que ya son clientes del banco. Por lo tanto, no es posible recibir de una entidad de la que no somos clientes esta oferta. Las entidades analizan el riesgo de cada cliente mediante scoring. A partir de aquí, fijan una cantidad que consideran más que viable que se pueda devolver. Hay que tener en cuenta que la morosidad en este tipo de operaciones es muy bajo, de aquí el gran interés de las entidades para potenciarlas. Así, sus principales características son las siguientes:

¿Vale la pena aceptarlos?

Teniendo en cuenta que muchas veces van destinados a personas sin necesidades de financiación y que los costes a soportar son mayores que en un préstamo normal, solamente se recomiendan si de verdad hay una necesidad muy específica de obtener efectivo a corto plazo para una determinada inversión o gasto.