Economía
PENSIONES

Novedad en la Seguridad Social: los divorciados podrán cobrar la pensión de viudedad

Podrás cobrar pensión de viudedad aunque estés divorciado

La Ley General de la Seguridad Social (LGSS) establece que las personas divorciadas o separadas legalmente tienen derecho a recibir una pensión de viudedad de la Seguridad Social en caso de fallecimiento de su expareja. Sin embargo, esta prestación no está garantizada en todos los casos, ya que diversos factores, como contraer o no un nuevo matrimonio, la existencia de hijos en común, la percepción de una pensión compensatoria, y el año de la ruptura, influyen en el acceso a esta prestación.

La pensión de viudedad es vitalicia y se detallan las condiciones para su percepción. Dichas condiciones están vinculadas a los requisitos de cotización del fallecido. En el caso de haber estado dado de alta en la Seguridad Social o en una situación asimilada (por ejemplo, cobrando una pensión de jubilación o de incapacidad), se requiere haber cotizado 500 días dentro de un periodo ininterrumpido de cinco años antes de la muerte o 15 años a lo largo de toda la vida laboral. Para los pensionistas, no se exige periodo de cotización, ni en caso de fallecimiento por accidente (aunque no sea laboral) ni por enfermedad profesional.

Pensión de viudedad

La ley contempla dos vías de acceso a la pensión de viudedad: a través del matrimonio en el momento del fallecimiento o, en el caso de parejas de hecho, demostrando una convivencia estable superior a cinco años antes de la muerte.

Estos son los supuestos específicos para acceder a la pensión de viudedad después del divorcio

En situaciones excepcionales, si el beneficiario fallece, el nuevo viudo puede elegir entre cobrar la antigua pensión o la nueva.

Este análisis detallado resalta la complejidad de las condiciones que rodean el acceso a la pensión de viudedad para personas divorciadas o separadas legalmente. Cada supuesto específico presenta sus propios requisitos y excepciones, lo que subraya la importancia de comprender a fondo la normativa vigente y buscar asesoramiento especializado en caso de dudas.

La pensión de viudedad para personas divorciadas o separadas legalmente es un tema complejo que requiere una comprensión detallada de las circunstancias específicas de cada caso. Además de los supuestos previamente mencionados, hay factores adicionales que pueden influir en la percepción de esta prestación. Por ejemplo, la legislación establece que en casos de divorcio antes del 1 de enero de 2008, el tiempo transcurrido desde la separación y la duración del matrimonio son elementos clave para determinar el acceso a la pensión de viudedad. Esta consideración resalta la importancia de tener en cuenta la temporalidad de los eventos y cómo estos afectan a los derechos de los beneficiarios.

Además, la posibilidad de mantener la pensión de viudedad después de contraer matrimonio nuevamente subraya la necesidad de equilibrar las necesidades económicas con las decisiones personales. Muchos beneficiarios pueden encontrarse en una encrucijada al considerar formar una nueva familia o relación, ya que formalizar un nuevo vínculo puede implicar la pérdida de la pensión. Este dilema destaca la complejidad de la normativa y la importancia de una planificación financiera cuidadosa.