La ‘ley Calvo’ para aumentar los permisos laborales supone un gasto extra de 1.541 millones
La proposición de ley impulsada por la vicepresidenta y ministra de Igualdad, Carmen Calvo, para aumentar los permisos laborales, entre ellos el de paternidad hasta las 6 semanas obligatorias, y sancionar a empresas que incumplan una serie de pautas de conciliación tendría un coste añadido de 1.541,3 millones de euros para las arcas públicas.
Así lo estimó el Ejecutivo de Mariano Rajoy el pasado marzo cuando recurrió a su derecho constitucional de veto para instar a la Mesa del Congreso de los Diputados a la no tramitación de esta iniciativa socialista por cuanto suponía un incremento extra de los créditos presupuestarios de 2017 ya aprobados.
Sin embargo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha situado este miércoles dicha propuesta en el primer plano de su agenda política. En respuesta a una pregunta parlamentaria realizada por el líder de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, en la primera sesión de control al nuevo Ejecutivo en la Cámara Baja, Sánchez ha recordado que el Congreso tramita en estos momentos -tras ordenar Moncloa que se levante el veto- dos normas «importantes» para «lograr la igualdad» en España: una de Unidos Podemos sobre la «brecha salarial» y otra del PSOE sobre «igualdad laboral».
En este contexto, Sánchez ha fijado en su hoja de ruta los permisos de paternidad y maternidad como una de las medidas necesarias para «reconstruir» los derechos y libertades «desmantelados» por el Ejecutivo del PP. En concreto, ha señalado que «quiere» que sean tales permisos sean «intransferibles» y que tengan «una remuneración adecuada».
Sin embargo, el jefe del Ejecutivo socialista ha evitado asegurar a Unidos Podemos que los permisos de maternidad y paternidad vayan a ser equiparados en las 16 semanas, como reclama la formación de Pablo Iglesias. Sánchez se ha limitado a apelar a la colaboración parlamentaria. «Este Gobierno va a gobernar con el Parlamento, no contra», ha declarado desde el escaño.
La idea que maneja el Gobierno y que parte de la proposición de ley registrada por los socialistas el pasado marzo consiste en elevar de las cuatro semanas actuales a seis el permiso de partido tras el nacimiento del hijo y que sean obligatorias en lugar de voluntarias. En el marco de la negociación de los Presupuestos Generales de 2018, PP y Ciudadanos pactaron ampliar a cinco semanas el permiso de los padres.
Enmiendas parciales
En sus enmiendas parciales a esos Presupuestos de 2018 -que todavía deben recibir el visto bueno definitivo del Congreso-, el PSOE calculó que ese paso de las cuatro semanas voluntarias actuales a seis obligatorias en el permiso de paternidad tiene un coste de 290,7 millones euros.
Además, otra enmienda de los socialistas, también extraída de su propuesta de ‘Ley de Igualdad de Trato y Oportunidades entre hombres y mujeres en el empleo y la ocupación’, planteó la puesta en marcha de una prestación no contributiva de maternidad para desempleadas en el ámbito de la Seguridad Social de seis semanas de duración. Aquí los socialistas cifraron su aplicación en 101 millones de euros.
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