Economía

José Manuel Vargas controlará al presidente independentista de Fluidra tras la fusión con Zodiac

El ex presidente de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) José Manuel Vargas va a ser el encargado de defender los intereses de la sociedad de capital riesgo Rhone Capital en el consejo de administración de Fluidra tras la fusión con la empresa norteamericana Zodiac. Su principal misión será controlar al presidente del grupo, Eloi Planes, y evitar que su ideología independentista perjudique a la gestión de la compañía.

Tal como avanzó OKDIARIO hace unas semanas, Planes sigue conservando el poder ejecutivo tras la fusión entre Fluidra y Zodiac, al menos sobre el papel, porque según confirman fuentes cercanas al consejo de administración Vargas será el encargado de «poner el criterio y asegurar el control» para que la deriva independentista de Planes no perjudique los intereses de Rhone Capital.

Planes ha conseguido, por el momento, que la sede de la nueva empresa fusionada se mantenga en Sabadell. Su padre, Joan, es el presidente de honor de Fluidra y el pasado octubre defendió en el Pleno de la Cámara de Barcelona que su empresa no saldría de Cataluña «bajo ningún pretexto», poniendo sus intereses políticos personales por encima de los de los accionistas de la compañía..

Las fuentes consultadas indican que a Rhone Capital le preocupa el hecho de que la familia Planes sea una de las más activistas a la hora de apoyar el secesionismo en Cataluña. No en vano el actual presidente pertenece al lobby independentista FemCat, una fundación que ha respaldado el golpe de Estado de Carles Puigdemont y que agrupa a empresarios y directivos independentistas catalanes cuyo objetivo se resume en su lema: «hacer de Cataluña unos de los mejores países del mundo».

Rhone Capital es una de las multinacionales de capital riesgo que han sido más activas en el último año y en España estuvo a punto de cerrar el pasado septiembre un acuerdo con Prisa para adquirir Santillana, la joya de la corona del grupo editorial. En el primer trimestre de 2018 concluirá la operación de integración entre Fluidra y Zodiac que ha impulsado esta firma y que controlará con un 42% del capital de la sociedad resultante.

Vargas será uno de los miembros del consejo de administración de la nueva Fluidra, en representación de Rhone Group. La compañía resultante tendrá unas ventas anuales de 1.300 millones de euros, un beneficio bruto operativo (ebitda) de 210 millones de euros y una plantilla de 5.500 empleados operando en 46 países.

El ex presidente de AENA salió del gestor aeroportuario con un sabor agridulce, ya que los conflictos en el aeropuerto de El Prat ensombrecieron su gestión haciendo olvidar que en 2015 la compañía protagonizó una de las mayores salidas a Bolsa (OPV) de la historia. Desde entonces los títulos de AENA han multiplicado por tres su valor en Bolsa impulsando su beneficio gracias al aumento del tráfico de pasajeros.

Además, Vargas fue uno de los principales defensores de lanzar una contraoferta para adquirir Abertis, tras la Oferta Pública de Adquisición (OPA) presentada por la italiana Atlantia. El fondo TCI estaba de acuerdo en realizar esta operación y, cuando el mercado esperaba que se presentara el folleto ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el Gobierno bloqueó la contraoferta haciendo valer su mayoría del capital en AENA.

Esto fue lo que provocó su salida precipitada del gestor aeroportuario y no la crisis generada por el conflicto sindical en El Prat. Vargas siempre quiso que el Estado avanzara en la privatización total de AENA, contra el criterio del ministro de Fomento, Íñigo Gómez de la Serna.

Además de sentarse en el consejo de administración de la nueva Fluidra, Vargas trabajará en el departamento de Estrategia de Rhone Capital para la Península Ibérica y Latinoamérica, centrándose en las operaciones globales relacionadas con infraestructuras.

Antes de su paso por AENA, este ejecutivo fue el encargado de llevar a cabo la salida a Bolsa de Vocento. Su experiencia en medios de comunicación hizo que sonara su nombre como uno de los candidatos para suceder a Juan Luís Cebrián al frente de Prisa y contaba con el respaldo del Palacio de la Moncloa. Finalmente el elegido ha sido Manuel Polanco, que relevará a Cebrián el próximo 1 de enero.