Hipotecas: el Gobierno admite que el IRPH es «difícil de entender» en la vista ante el tribunal europeo
La Abogacía del Estado, dependiente del Gobierno, ha admitido este jueves en el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que el Índice de Referencia de Préstamos Hipotecarios (IRPH), que tiene atrapados a miles de hipotecados españoles, es «difícil de entender» para los consumidores. Sin embargo, en la vista definitiva contra esta figura alternativa al euríbor por una cuestión prejudicial presentada por una magistrada de Palma de Mallorca en abril pasado, el abogado del Estado se ha posicionado a favor de los bancos y ha defendido que el consumidor estaba perfectamente informado del contenido de este índice para calcular las hipotecas.
La magistrada del Juzgado de Primera Instancia número 17 de Palma de Mallorca, Margarita Isabel Poveda, presentó en abril pasado esta segunda cuestión prejudicial contra el IRPH ante las dudas que había dejado la primera sentencia del TJUE, en marzo de 2020, que dejó a la libre interpretación de los jueces nacionales la validez de este índice desde un punto de vista de la transparencia. Las sentencias posteriores han dado la razón mayoritariamente a la banca, pero también en algún caso a los consumidores.
Ante la falta de una sentencia clara, la juez balear ha vuelto a pedir al TJUE que se posicione con el argumento de que la banca ha usurpado a los consumidores el derecho al conocimiento pleno del producto y el derecho a comparar con otros productos, lo que supone un caso claro de competencia desleal según las directivas europeas. Además, el IRPH es un índice difícil de calcular y siempre arroja un valor más caro que el euríbor, por lo que los bancos estaban obligados a aplicar el llamado diferencial negativo e igualarlo al euríbor, algo que la banca no hacía.
El resultado es que hay miles de afectados a los que se les vendió un índice variable mejor que el euríbor y que en la práctica es mucho más caro. La banca se juega entre 3.600 y 44.000 millones, según cálculos de Morgan Stanley, aunque la mayoría de bancos ha dejado de considerar en sus cuentas este caso como un problema que obligue a hacer provisiones. En este procedimiento la Comisión Europea ya se posicionó a favor de los intereses de los consumidores.
«Difícil de entender»
Según explican fuentes al tanto de lo ocurrido en la audiencia definitiva el jueves -ha quedado visto para sentencia-, el abogado del Estado no ha respondido satisfactoriamente a la pregunta de los letrados europeos sobre si este índice era entendible para los consumidores. Tampoco si los bancos ofrecían el llamado diferencial negativo para evitar que los consumidores pagaran una hipoteca más cara que con el tradicional euríbor. La banca ha estado defendida por el bufete Pérez Llorca.
Cerrado el caso, ahora el TJUE no tiene límite máximo para dictar sentencia. Si es favorable a los consumidores, que han estado defendidos por el despacho Fuster Fabra Abogados, los jueces nacionales deberán declarar esa cláusula nula. A partir de ahí, depende de los argumentos de la sentencia para saber si es retroactivo y los consumidores recuperan el dinero pagado de más o simplemente empiezan a pagar menos cambiando las condiciones de su hipoteca a partir de la sentencia.