Economía

Fitch mantiene la nota de España pero alerta del peligro del independentismo y de Podemos

Fitch está satisfecha con los resultados del 27-S al considerar que no suponen una amenaza a corto plazo en el orden constitucional. Sin embargo, la agencia cree necesario que el Gobierno que resulte de las generales de diciembre alcance un acuerdo con Cataluña satisfactorio para ambas partes y para el resto de autonomías, o prevé tensiones que afecten a la estabilidad del país y por tanto mermen la confianza de los inversores.

La calificación de la deuda de España se mantiene en aprobado alto (BBB+) con perspectiva estable. Sin embargo, Fitch considera que el «sólido crecimiento» de la economía es cíclico y que conviene esperar, tal y como también advirtió Standard & Poor’s (S&P) hace unas semanas, a ver quién ocupa el Palacio de la Moncloa a partir de enero, con mal designio si Podemos se instala directa o indirectamente en el Ejecutivo.

La agencia estima que el objetivo de déficit apenas se desviará una décima (hasta el 4,3% del PIB) de lo comprometido con Bruselas y que en 2016 el incumplimiento será algo mayor (3,1% frente al 2,8% pretendido). Por último, mantiene que el potencial de crecimiento de la economía española es del 1,5% para el medio plazo gracias a las reformas estructurales de Mariano Rajoy y su equipo económico.