Economía

2017 se convierte en el año del desastre económico de Cataluña

Este 2017 pasará a la historia como uno de los peores años económicos de Cataluña y todo gracias al golpe independentista. Una jugada del gobierno de Carles Puigdemont que  ha sembrado la incertidumbre a una economía que llegó a representar cerca del 19% del Producto Interior Bruto (PIB).
Los datos demuestran un ‘procés’ independentista que nos va a salir caro.

Durante el último Consejo de Ministros del año, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, afirmó que «la única sombra es el factor de inestabilidad que genera la política en Cataluña»,Rajoy recordó que por este motivo se revisó a la baja la previsión de crecimiento para 2018, hasta el 2,3 %.

Tras las elecciones catalanas del pasado 21 de diciembre, la agencia de medición de riesgos Moody’s advertía que el resultado de los comicios «es negativo para el crecimiento de la economía española».

La agencia de calificación española Axesor asegura que «la economía española experimentará una paulatina desaceleración en los próximos trimestres, que la llevará a registrar un avance del 2,5% en 2018, más de medio punto porcentual por debajo del crecimiento con el que cerrará 2017».  En su informe resaltan que tras el 21-D , «la cuestión catalana sigue sin resolverse». Advierte que de no resolverse este escenario,  «se podría generar un riesgo real de una mayor inestabilidad financiera y económica».

Incluso antes de esas elecciones, la incertidumbre provocó un frenazo en el crecimiento de la economía catalana, hasta alcanzar niveles del 0,4 % en el cuarto trimestre del año, es decir, la mitad de lo mantenido en otros trimestres. Todo ello sumado a la previsión de crecimiento del Banco de España que rebajaba la previsión en el conjunto del país para los próximos dos años.

Un 2017 donde casi 3.200 empresas han decidido trasladar su sede social o fiscal a otros puntos de la geografía española desde el referéndum ilegal del 1 de octubre.

En este tercer trimestre, la inversión productiva extranjera en España ha caído un 42,9% , fundamentalmente por el desplome de las inversiones destinadas a Cataluña en un 75%. En estos momentos Cataluña es la comunidad más inflacionista y la más endeudada de España. Unas consecuencias económicas dramáticas de las que no nos recuperaremos pronto.