Economía
amenaza para la inflación

Cierre del gasoducto del Magreb: el precio del gas por barco se encarece un 16% los primeros 10 días

La primera consecuencia del cierre del gasoducto del Magreb por parte del Gobierno de Argelia el pasado 31 de octubre por sus problemas con Marruecos ya se ha producido. La alternativa de España para abastecerse de los 6 bcm (miles de millones de metros cúbicos) anuales que llegan al país por este gasoducto es aumentar las compras de gas natural licuado (GNL) por barco para evitar el desabastecimiento este invierno. El problema es que es más caro que comprarlo por gasoducto. Y, además, desde el 1 de noviembre el precio del GNL ha aumentado en un 16%, según los datos diarios de Mibgas hasta el 10 de este mes.

Según los datos del Mibgas, operador del mercado organizado encargado de cruzar la oferta y la demanda de las compañías interesadas en realizar operaciones de compra y venta de gas en España, el precio del GNL el día del cierre del gasoducto del Magreb quedó fijado en 66,5 euros por MWh, después de iniciar una caída en el precio desde máximos a partir de mediados de octubre.

Sin embargo, en los primeros días sin la llegada del gas por el gasoducto del Magreb, el precio del gas por barco se ha dado la vuelta y se ha encarecido en el citado 16%. A cierre del 9 de noviembre el precio quedó registrado en 77 euros por MWh, 10,5 euros por MWh superior al inicio del mes. El 1 de enero de 2021 el precio del GNL era de 20 euros por MWh. Hace justo un año, en noviembre de 2020, el precio era de 14 euros por MWh. Hoy vale casi seis veces más.

Y este es el otro problema que va a tener para España el cierre del gasoducto del Magreb. El incremento en los precios del gas -la mitad de lo consumido en España se trae por barco ya antes del cierre del tubo de Argelia, según Cores- provocará un aumento en los precios para los ciudadanos y un nuevo subidón de la inflación.

En octubre el IPC ya se situó en el 5,5% interanual, y la evolución de la electricidad, el petróleo y el gas augura que va a continuar en aumento en los dos meses que quedan de año. La inflación aumentará por encima de los salarios y la población perderá poder adquisitivo.

Además, para muchos ciudadanos será cada vez más difícil poder afrontar los gastos de mantener la calefacción con el aumento del precio del gas, mientras el Gobierno presume de un escudo social que no va a mejorar la situación en los hogares más necesitados. La subida del gas afecta también a la electricidad, ya que esta energía marca en muchas ocasiones el precio final de la luz en el pool eléctrico.

Reservas

La otra consecuencia del cierre del gasoducto es el riesgo de desabastecimiento de gas en este invierno, cuando Enagás calcula que el consumo aumentará casi un 8% sobre 2020. El gasoducto del Magreb traía a España 6 bcm de energía, mientras que el otro tubo, el Medgaz, va a asumir sólo 2 bcm anuales cuando esté completada la ampliación.

Faltan 4 bcm anuales que tienen que venir por barco, en medio también de una batalla mundial por el GNL debido a la intensificación de las compras de China. El Gobierno y Enagás han insistido en que no habrá apagón en España este invierno y la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha destacado que hay 40 días de reservas en el subsuelo español y en las regasificadoras.