Calviño recula: no descarta que el IPC suba en verano pese a que decía que la inflación había tocado techo
El Gobierno mantiene la previsión de que la inflación irá desacelerándose progresivamente durante la segunda parte del año, Pero, para cubrirse las espaldas, no «descarta oscilaciones durante los meses de verano» derivadas de posibles efectos base y teniendo en cuenta la alta incertidumbre del contexto económico global. Tras conocer que el IPC escaló en mayo hasta el 8,7% por el encarecimiento de gasolinas y alimentos, fuentes del ministerio de Nadia Calviño destacan que esta tasa de variación interanual en el quinto mes del año está por debajo del máximo registrado en el pasado mes de marzo.
El Ejecutivo ha defendido así que las medidas de respuesta al impacto de la guerra «claramente están limitando el alza de los precios» y ha asegurado que la próxima entrada en vigor de la limitación de los precios de la electricidad en el mercado mayorista proporcionará «un seguro adicional» ante posibles alzas del precio de la energía en los mercados internacionales.
Sin embargo, hace menos de un mes, Calviño, aseguraba que España no está en una «espiral» y que la inflación iba a bajar «en la segunda mitad de este año». «Nuestro análisis apunta a que, aunque pueda haber repuntes, ya habríamos dejado atrás el pico y a partir del segundo semestre iniciaremos la senda de desaceleración de los precios. Todos los organismos, incluido el FMI, prevén que la inflación vuelva a situarse en torno al 2% en 2023, por debajo de la media europea», afirmaba Calviño en una entrevista.
Y es que los datos del mes de mayo no invitan al optimismo. El INE incorpora en el avance de datos del IPC una estimación de la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos), que aumentó en mayo medio punto, hasta el 4,9%, su valor más alto desde octubre de 1995. De este modo, la subyacente se sitúa casi cuatro puntos por debajo de la tasa del IPC general.
En tasa mensual, el IPC registró en mayo un repunte del 0,8% respecto a abril, en contraste con la rebaja del 0,2% experimentada el mes anterior. Se trata de la mayor subida de la inflación en un mes de mayo desde el año 2018. En el quinto mes de 2022, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 8,5%, dos décimas más que en abril. Por su parte, el indicador adelantado del IPCA aumentó un 0,7% en tasa mensual.
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