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El avance de Rusia en Ucrania no hace sangrar a las Bolsas: era el escenario «más previsible»

  • Laura Piedehierro
  • Periodista. Cuando no escribo del Ibex 35 me gusta mirar cuadros. Antes en Estrategias de inversión y ahora aquí.

Parecía que iba a ser mucho peor. Las Bolsas europeas no sufren el impacto de los últimos pasos que Rusia ha dado en el conflicto de Ucrania y salvan con leves subidas la que por ahora es la última bola del partido que es esta crisis geopolítica. La sangre no ha llegado a la renta variable del viejo continente debido a que este escenario ya había sido previsto por el mercado y además, aunque negativo, apuntan algunos analistas, es el menos malo de todos los posibles.

El martes las Bolsas europeas iniciaban la sesión con caídas del 2% como consecuencia de que Rusia reconocía la independencia de dos provincias ucranianas, Donetsk y Luhanks, y dejaba la puerta abierta al despliegue de tropas militares. Tras el susto inicial, los índices del viejo continente amortiguaron el golpe, en algunos casos, como el del Ibex 35, incluso terminando la jornada en positivo.

“Rusia hace lo evidente, que ya comentamos: reconocer la independencia (y la autoridad y tutelas rusas, de paso) sobre las zonas fronterizas con Ucrania que ya de facto invadió hace mucho. Es lo mismo que con Crimea anteriormente. Pero este es, por ahora, el desenlace menos agresivo de todos los posibles, siendo pragmáticos”, apuntaban los analistas de Bankinter.

“Otra cosa es que Rusia se detenga ahí, que ya veremos. Es probable que se conforme con esto por miedo a las sanciones y al aislamiento, de manera que se evitaría lo peor, el desenlace militar duro con invasión en toda regla. Podemos estar frente al final del problema, a pesar de la tensión. Aunque haya que esperar unos días para saberlo, el aspecto del desenlace no es necesariamente malo”, subrayaban también desde la entidad naranja.

A pesar de que se ha cumplido el escenario que los mercados consideraban “más previsible”, explica Iñigo Isardo, analista de Link Securities, quien destaca que, además, no es el escenario más negativo posible. Las peores previsiones apuntaban a una invasión total de las dos provincias independizadas o incluso la invasión total del país. “Por ello, tras las caídas iniciales, y la respuesta de la UE y de EEUU, en una segunda lectura, y con el nivel de sobreventa de algunos valores, los inversores han tomado posiciones en las compañías más castigados”, destaca.

Calma tensa

Como respuesta al reconocimiento de las regiones separatistas, los ministros de Exteriores de la Unión Europea han aprobado sancionar a sus responsables. Han aprobado en un paquete que incluye medidas financieras, contra mandos militares y miembros de la Duma. En paralelo, Alemania ha anunciado que paralizará la aprobación del gasoducto ‘Nord Stream 2’,

A la espera de conocer cuáles serán los siguientes movimientos, hay una calma tensa en los mercados. “La profundización de la crisis de Ucrania añade incertidumbre a los mercados globales, aumentando la inflación existente y los temores de subidas de tipos de la Reserva Federal. Sin embargo, la historia muestra que la geopolítica tiene un impacto limitado en los mercados globales a medio plazo, siendo peores los efectos previos al evento. El miedo a la reacción de las materias primas no debe exagerarse”, apunta Ben Laidler, extratega de mercados globales de eToro.

Más pesimista con la evolución del conflicto, y su consiguiente impacto en las Bolsas, se muestra James Athey, director de inversiones de la gestora abrdn, quien advierte de que los inversores deben enfrentarse a una posible realidad que incluye la confrontación militar, nuevas apreciaciones del precio del petróleo y, por tanto, una mayor inflación, un menor crecimiento y una política monetaria más estricta en Occidente. “No es de extrañar que la renta variable se marchite en estas condiciones”, incide.

Petróleo y gas

Recorrido inverso al de las Bolsas registran los precios del petróleo. En lo más duro de las caídas, los futuros del crudo Brent europeo para entrega en abril llegó a superarlos 99 dólares, máximos no vistos desde 2014. Por el contrario, a final de la jornada las fuertes subidas se reducían. “Es una situación que el mercado esperaba, puesto que, si Rusia invadía de alguna manera Ucrania, se producirían sanciones a Moscú por parte la UE y de Estados Unidos, con posibilidad de que se produzca una escasez de la oferta, de ahí que los precios puedan irse a máximos”, indica Diego Morín, analista de IG. Los expertos dan por hecho que el oro negro rebasará en el corto plazo los 100 dólares. Algunos incluso lo ven por encima de los 120.

Los futuros de gas (TTF) holandés de entrega en marzo, usados como referencia en el viejo continente alcanzaron el martes los 80 euros el megavatio hora (MWh), aunque todavía lejos de los máximos históricos de finales de 2021, cuando superó los 180 euros/MWh.