Economía
POR EL IRFP

Atento a tu nómina: el giro en el SMI que lo cambia todo

El SMI llegará a la nómina de los trabajadores en el mes de febrero con IRPF incluido

La subida confirmada y publicada en el BOE del Salario Mínimo Interprofesional ha vuelto a sacar a relucir las costuras de un Gobierno de Pedro Sánchez que parece a la deriva. La lucha entre María Jesús Montero y Yolanda Díaz acerca del IRPF, de momento la gana la ministra de Hacienda, pero todo hace indicar que por parte de Sumar llevarán esta tributación al Congreso para buscar el apoyo de la oposición. De momento, lo que parece claro es que el SMI llegará en marzo a la nómina de los trabajadores correspondiente al mes de febrero… con IRPF incluido.

La subida del 4,4% del Salario Mínimo Interprofesional fue publicada el pasado miércoles en el Boletín Oficial del Estado a través del Real Decreto 87/2025, de 11 de febrero, por el que se fija el Salario Mínimo Interprofesional para 2025. Esto quiere decir que el SMI para 2025 pasa de los 15.876 euros anuales (1.154 euros en 14 pagas) de 2024 a los 16.576 euros anuales, que equivale a 1.184 euros mensuales en 14 pagas que los trabajadores recibirán este 2025 con carácter retroactivo.

Esta subida total de 700 euros al año fue celebrada por Yolanda Díaz como una gran victoria, pero la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social parece que no se esperaba la decisión contraria de su compañera de Gobierno, María Jesús Montero. La ministra de Hacienda avisó y ha ido hasta el final con su propuesta de aplicar el IRPF en las nóminas mensuales de los trabajadores que cobran el SMI. Todo ello debido a que los 16.576 euros superan el límite exento de tributación que sigue fijado en 15.876 euros anuales.

Pedro Sánchez, María Jesús Montero y Yolanda Díaz. (Foto: EP)

El SMI en la nómina con el IRPF

Esta decisión ha provocado una guerra en el seno del Gobierno de Pedro Sánchez entre el lado socialista, que aboga por que este salario tiene que tributar después de la subida, y la propuesta de Sumar, que quiere que los 2,4 millones del SMI queden exentos de declarar el IRPF. Incluso Yolanda Díaz y compañía han amenazado con tumbar esta propuesta en el Congreso, que aún tiene que dar luz verde a una de las propuestas estrella de la ex de Podemos.

Y, ¿cómo afecta el IRPF a la nómina de los trabajadores que cobran el SMI? Pues la subida de 50 euros al mes quedará en cerca de 30 euros según la situación personal que atraviesen los asalariados. Hay que tener en cuenta el aumento de los 700 euros anuales del SMI; al convertirlo en bruto, hay que restarle 560 euros al año que se llevará Hacienda de la nómina. Así que al trabajador le quedarán limpios 354 euros al año.

Por ejemplo, en el caso de los solteros sin hijos que cobren el SMI, tendrán una retención del 1,81% en la nómina, que son unos 21,4 euros en la nómina. Así que la subida de 50 euros netos quedará en cerca de 29 euros de forma mensual. Este será el grupo de la población que más sufra la inclusión del IRPF en el SMI. También habrá otros grupos exentos, como son los trabajadores con pareja e hijos menores de tres años y las personas con familiares dependientes.

Yolanda Díaz quiere dar pelea

Desde Sumar no se dan por vencidos y siguen con la intención de llevar al Congreso esta decisión de María Jesús Montero. Así lo avisó Ernesto Urtasun en una comparecencia reciente en la que quiso lanzar un mensaje al presidente del Gobierno y la ministra de Hacienda. «Es una pelea que vale la pena, que vamos a dar. Hemos dicho que estamos dispuestos a arreglarlo en el seno del Gobierno, sobre todo porque creo que en política hay una cosa que no hay que hacer, que es enrocarse cuando uno tiene el debate socialmente perdido y está aislado en el Congreso», avisó.

Yolanda Díaz y Pedro Sánchez en el Congreso. (EP)

Verónica Martínez, portavoz de Sumar en el Congreso, habló de la proposición de ley presentada y que se llevará al Congreso en la próxima votación. «Vamos a llegar hasta el final, por eso hemos presentado una proposición de ley. No es una amenaza para nadie. Es mantener nuestra posición por escrito. Vamos a llegar hasta el final para que el SMI no tribute», confesó, dejando clara la evidente situación de guerra fría que se vive dentro del Gobierno acerca del SMI.