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Alcampo la lía con el precio de uno de sus productos y sus clientes estallan

Alcampo, supermercado conocido por sus buenas ofertas y promociones, se ha consolidado como uno de los preferidos por muchos consumidores en España. Ofertas como la de muchos productos a 1 euro han captado la atención de una clientela siempre en busca de ahorrar en su compra diaria. Este atractivo modelo de negocio ha permitido a Alcampo mantener una base de clientes fieles, que confían en encontrar precios competitivos y una amplia variedad de productos tanto en sus tiendas físicas como en su plataforma online. Sin embargo, Alcampo la ha liado debido al precio de uno de sus productos, provocando el enfado de algunos de sus clientes.

Todo comenzó cuando uno de los compradores habituales de Alcampo se dio cuenta de una discrepancia en el precio de un producto específico entre la tienda física Mi Alcampo (pequeños establecimientos de Alcampo que suelen estar en calles céntricas de las principales ciudades) y la tienda online. Este cliente, al comparar los precios, descubrió que el costo del mismo producto era significativamente diferente dependiendo del canal de venta. La situación se viralizó rápidamente en redes sociales, causando un revuelo y poniendo a la cadena de supermercados bajo el escrutinio público. La problemática se originó con un simple pero esencial producto: una botella de agua. La diferencia de precio entre la tienda física y la tienda online no solo sorprendió al cliente afectado, sino que también levantó cuestionamientos sobre la transparencia y la ética en la fijación de precios por parte de Alcampo. Esta situación ha provocado un amplio debate sobre la equidad en los precios y la confianza de los consumidores en las grandes cadenas de supermercados.

Alcampo la lía por el precio de uno de sus productos

La controversia se inició cuando Marta Medina, una cliente de Alcampo, publicó en la red social X su desconcierto al encontrar que una botella de agua en un establecimiento de Mi Alcampo costaba 2,99 euros, mientras que en la tienda online de Alcampo, la misma botella costaba solo 1,64 euros. Esta disparidad generó una rápida reacción de los internautas, muchos de los cuales se sintieron engañados y estafados.

El agua en cuestión era de la marca Evian y estaba disponible en un supermercado de Mi Alcampo, ubicado en una zona céntrica de Barcelona, en la plaza San Jaime. Este lugar, frecuentado por miles de personas diariamente, es un punto estratégico que podría justificar un precio más elevado debido al alto costo del alquiler y el flujo constante de clientes. Sin embargo, la diferencia de casi el doble del precio respecto a la tienda online no pasó desapercibida y levantó muchas críticas.

¿A qué se debe esta diferencia de precio?

Para entender esta diferencia, el portal Consumidor Global consultó a varios expertos en comercio y finanzas. Emili Vizuete, director del máster en Comercio y Finanzas Internacionales de la Universidad de Barcelona, explicó que la variabilidad de precios entre los puntos de venta de proximidad y las tiendas online se debe a que los establecimientos de Mi Alcampo son franquicias. Cada franquiciado tiene la libertad de establecer los precios según la ubicación y las condiciones del mercado local.

Vizuete destacó que en áreas de alta afluencia de público, es común que los precios sean más altos, ya que los propietarios de las franquicias buscan maximizar sus ganancias debido a la mayor demanda. Esta práctica, aunque legal, puede generar desconcierto y malestar entre los consumidores que no entienden por qué deben pagar más por el mismo producto en diferentes puntos de venta de la misma cadena.

Diferencias entre le canal online y el físico

Por otro lado, hablando con el mismo portal, Michele Girotto, coordinadora de la Gestión de Customer Experience, Retail y e-commerce en la Universidad de Barcelona, señaló que es una estrategia común en las empresas fijar precios diferentes según el canal de distribución. Los precios online suelen ser más competitivos debido a la naturaleza de las compras por volumen y los menores costos operativos en comparación con las tiendas físicas.

Girotto explicó que las tiendas físicas, especialmente en ubicaciones premium, tienen mayores costos de operación, como el alquiler y los salarios del personal, lo que se refleja en precios más altos. Además, la flexibilidad para negociar precios con los proveedores y establecer márgenes de ganancia según el canal de venta es una práctica aceptada y legal dentro de la estrategia comercial de las empresas.

Puede que sorprenda pero lo cierto es que si nos ponemos a mirar muchos de los precios que tienen productos en tiendas ubicadas en zonas céntricas o de paso de mucho turista, seguro que encontraremos también diferencia de precio con respecto a la web. Es por ello, que el incidente con el precio de la botella de agua en Alcampo ha puesto en evidencia las complejidades del sistema de precios en grandes cadenas de supermercados y la importancia de la transparencia para mantener la confianza de los consumidores.