Brahim logró desbloquear el muro amarillo del Cádiz con un golazo increíble en el minuto 51 que puso el 1-0 a favor del Real Madrid y asistió a Bellingham en el segundo con una victoria que acercó la Liga número 36 a la entidad madridista. Antes del gol blanco, Courtois realizó un auténtico paradón salvando el gol gaditano en un mano a mano ante Chris Ramos. Joselu hizo el definitivo 3-0 tras una gran jugada de Nacho.
Corría el minuto 50 de partido en el Santiago Bernabéu, y tras 45 minutos de asedio blanco, donde el Real Madrid se había encontrado con un Cádiz totalmente encerrado en su área, los de Carlo Ancelotti salieron de nuevo al césped decididos a ganar el partido. Güler tuvo una falta directa que se marchó fuera por muy poco y en el 50 tuvo el primer gol del partido el cuadro amarillo.
Chris Ramos se quedó solo en el mano a mano tras ganarle una carrera a Nacho. Fue en ese momento cuando Courtois se hizo grande, salió de su portería y se marcó una parada impresionante que el Bernabéu celebró como un gol. El belga demostraba de esta manera que ha vuelto igual que se fue, siendo el mejor. El guardameta del Real Madrid regresaba a la portería blanca 335 días después de su lesión.
Dos minutos después de la gran parada de Courtois que salvaba el 0-1, en el 52, llegó el 1-0 obra de Brahim. El talentoso atacante madridista se inventó un golazo impresionante para desbloquear al muro amarillo del Cádiz. Recibió la pelota de Luka Modric, se dio la vuelta y armó su letal disparo con la diestra directo a la escuadra. Un gol impresionante que acercaba a los blancos a su Liga número 36.
Bellingham firmó el segundo
Carlo Ancelotti hizo su primer cambio en el minuto 65 dando entrada a Jude Bellingham por Arda Güler. Ambos se llevaron la ovación por parte del respetable del Santiago Bernabéu. El mediocentro británico solamente tardó tres minutos en marcar el segundo del Real Madrid y sentenciar el choque frente al Cádiz.
Brahim Díaz, que fue protagonista anotando el 1-0 con un disparo letal, fue el encargado de asistir a Jude Bellingham para que este anotase a portería vacía, sentenciase el choque y marcase su gol número 18 en esta Liga.
Poco después, el técnico italiano volvió a mover el banquillo y le dio minutos a Vinicius. En su lugar se marchó Brahim Díaz, ovacionado por la grada, tras marcarse un auténtico partidazo con gol y asistencia que tumbaron a un Cádiz muy rocoso. El 3-0 lo convirtió Joselu en el descuento tras una gran jugada de Nacho.
Con esta victoria, el Real Madrid solamente necesita un punto para proclamarse campeón de Liga, la que sería la número 36 de su historia. Para ello tiene dos posibilidades para cantar el alirón. La primera es esperar a que en la tarde este sábado el Barcelona empate o pierde en campo del Girona, en un duelo donde la segunda plaza está en juego. Si eso pasa, los blancos serían campeones este mismo sábado. Si los de Xavi Hernández ganan en Montilivi, los de Carlo Ancelotti tendrían que esperar a la semana que viene contra el Granada en Los Cármenes donde solamente un punto les haría campeones de Liga.