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El equipo culé vive su primera crisis de la temporada

Toque de atención al vestuario del Barcelona

El Barcelona vive durante este parón su primera crisis tras la goleada recibida en Sevilla

Deco se encargó de avisar a su vestuario

Laporta escenifica su alejamiento de la Superliga acudiendo a la reunión de la ECA en Roma

  • Luis Cobos
  • Jerezano con sangre madrileña. Redactor de deportes. Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Amor eterno por la pelota.

El Barcelona vive su primera crisis deportiva de la temporada en este inicio del segundo año de Hansi Flick como entrenador azulgrana. El equipo culé afronta este parón de selecciones con sus internacionales desconectando del problema que afronta el Barça y con el club preocupado por el devenir que puede coger su vestuario. 

Nunca se sabe si un parón después de una dura derrota viene bien. Dos semanas que se van a hacer eternas en Can Barça tras una goleada en Sevilla que ha hecho mucho daño en el club. Ha removido todos los problemas y ha creado nuevos.

Las declaraciones de Deco, director deportivo azulgrana, el pasado martes, son un claro toque de atención al vestuario del Barcelona. Un vestuario que parece que se ha acomodado después del gran año cuajado el pasado curso. La marcha de Iñigo Martínez ha hecho mucho daño a la plantilla y el Barça ha perdido ese orden sin él.

«No somos tan magníficos o tan exuberantes como la gente nos pintó la temporada pasada. Sí somos un gran equipo cuando trabajamos, cuando vamos todos a una, pero no cuando no somos capaces de sacrificarnos por el compañero, que muchas veces pasa eso», dijo Deco avisando a sus jugadores de que si no trabajan por el equipo, el Barcelona no va a ganar lo mismo que el pasado año.

«Si creemos que la calidad está por delante del trabajo, tenemos un problema», recalcó el director deportivo blaugrana. Y es que el Barcelona sí tiene un problema. Este toque de atención que ya escenificó Hansi Flick en Vallecas hablando de los egos y que ahora continúa Deco deja a las claras que el conjunto catalán debe recuperar a ese vestuario para volver a ser el equipo temido que era el curso pasado.

Muchos ojos apuntan a Lamine Yamal en este problema de vestuario, pero la joven perla culé no estuvo en Sevilla. Por ello el problema que apuntó antes Flick y ahora Deco, va mucho más allá. Un vestuario que ha rebajado su presión y que en Sevilla fue desnudado por un equipo con mucha más intensidad. Sacó todas sus debilidades a pasear y a final de mes tiene un Clásico que sin duda será un examen importante para medir el compromiso de este mismo vestuario.