Sin rumbo ni capitán

El Real Madrid está huérfano sin Sergio Ramos en el campo. El central sufre una lesión muscular en el sóleo y ha estado ausente en todos los partidos del mes de enero, coincidiendo con la caída en picado del equipo blanco. El de Camas es el hombre de referencia de los de Zidane y su ausencia pesa.

Su afán de liderazgo es lo que mantiene unido al vestuario. Sin el sobre el césped no hay nadie que levante la voz, que grite o que motive a sus compañeros. Cristiano nunca ha ejercido de líder espiritual con el grupo. El astro portugués aporta muchas cosas al equipo, como todos sus goles, y se ha ganado el respeto de sus compañeros… pero los galones con el grupo los pone Ramos.

El central es uno de los jugadores más queridos y realiza a la perfección su papel de capitán. Su personalidad y liderazgo es vital en el día a día del equipo y más en los momentos difíciles, por lo que su ausencia en el terreno de juego se está haciendo muy pesada para el grupo.

Además, sin el sevillano el equipo pierda la solidez defensiva. Los resultados sin Ramos en el campo dejan mucho que desear… Un empate ante el Numancia (2-2) y el Celta (2-2) y la derrota en el Bernabéu con el Villarreal (0-1). Desde la salida de Pepe este verano la zaga anda coja. Varane y Vallejo no terminan de convencer y Sergio busca pareja de baile. 

Ante la situación del equipo, el capitán está intentando forzar la máquina para acortar plazos en su lesión. Conocedor de las carencias defensivas, el internacional está dispuesto a machacarse noche y día para volver cuanto antes y ayudar al equipo, como ya lo ha hecho en otras ocasiones.

Ramos es el protagonista indiscutible de los grandes éxitos logrados por el Real Madrid en los últimos años, y el camero está dispuesto a todo por defender la elástica blanca.