Deportes

Sin prisa con Ansu Fati

El Barcelona no quiere cometer más errores con Ansu Fati y esperará a que el canterano esté al 110% para que regrese a los terrenos de juego

Xavi: «Nos jugamos la Champions, la Liga es prácticamente imposible»

Araujo, Piqué y Alves estarán contra el Rayo Vallecano

El Barça respira con Araujo

Con calma, muy despacio, sin urgencias, sin precipitaciones, con muchísima cautela. Así se plantearon desde el FC Barcelona la recuperación, adaptación y vuelta a los terrenos de juego de Ansu Fati. El canterano ha sido cuidado con mimo durante todos estos meses desde que volviera a lesionarse. Están siendo meses difíciles y desde el propio entorno del jugador, muy familiar, se pedía una especial atención a cómo evolucionaba el delantero culé en su aspecto físico y se está cumpliendo a rajatabla. Ante el Rayo Vallecano tampoco entra en la convocatoria.

Se ve ya la luz al final del túnel de Ansu Fati. Desde su grave lesión en 2020 el futbolista ha ido enlazando contratiempos que le han ido frenando más y más. De hecho, desde aquel 11 de noviembre de 2020 en el que se rompió el menisco interno de su rodilla izquierda tan sólo ha disputado 10 partidos, los que jugó entre finales de septiembre y principios de noviembre. Y los que jugó en enero. Entre ellos, más lesiones.

Está siendo una constante más que preocupante para el jugador y el Barça y es por ello que con este último traspié en forma de lesión se ha querido ir un poco más allá. Al jugador se le ha mimado muchísimo. A finales de marzo entró en la fase final de la recuperación de la lesión en el bíceps femoral de su pierna y se esperaba que el mes de abril volviera a los terrenos de juegos según las estimaciones iniciales.

Fue en ese momento cuando comenzó a aparecer en las sesiones de entrenamiento con el resto de compañeros, a las órdenes de Xavi. Desde muy pronto comenzó a disputar partidillos en los entrenamientos y las sensaciones eran muy positivas, haciendo pensar en que su vuelta estaba próxima. Desde principio de este mes de abril ya se comenzó a ver a pleno ritmo a Ansu con el grupo. Era uno más.

«Estoy con muchas ganas, el equipo ha mejorado. Estoy trabajando y espero que en breve pueda estar con el equipo. No sé cuándo podré volver. Estoy trabajando a diario y viendo las sensaciones. Hablando con el míster y los preparadores físicos y, dependiendo de las sensaciones, veremos. Poco a poco», decía por aquel entonces el propio jugador, este pasado 12 de abril, incluso no descartaba que pudiera jugar contra el Cádiz.

Pero llegó el Cádiz y pese a que no hubo ningún contratiempo con el jugador, siguiendo el ritmo diario de entrenamientos, tampoco fue convocado para este partido. En aquel momento, antes del encuentro ante los gaditanos, fue Mateu Alemany el que fijó la hoja de ruta actual: «El proceso es el previsto. Él está evolucionando muy bien, entrenando a alto ritmo, pero está claro que lo que pretendemos es que él esté al 100% y si puede ser, al 110% en condiciones cuando vuelva. Proteger esa situación y no tomar el más mínimo riesgo porque entendemos que lo fundamental es que no se reproduzcan esas lesiones, por lo tanto, proteger al futbolista es la prioridad absoluta ya sea una semana más o menos. El proceso es muy bueno, el trabajo que se está haciendo es perfecto, está en los parámetros que esperamos y cuanto antes lo veamos en el césped más contento estaremos todos».

Proteger y no tomar el más mínimo riesgo eran los mantras del club con el jugador, algo que se ha llevado a rajatabla. Ante el Rayo Vallecano tampoco aparecía el nombre entre los jugadores convocados por Xavi Hernández. Se quedaba de nuevo fuera y se ha aplazada una semana más su regreso. Otra más. Ya no será hasta mayo cuando Ansu pueda regresar.

«Si todo va bien, estará para el siguiente partido, contra el Mallorca. Está ya con el grupo totalmente. Es una nota muy positiva para nosotros y nos puede ayudar mucho», decía Xavi en la rueda de prensa previa al choque ante el Rayo en el Camp Nou confirmando la espera para el jugador. En el club no quieren que se repita ningún error y buscan limitar a cero cualquier posible riesgo, regresando solamente cuando esté a sus mejores niveles físicos.