Pinot reina en los Lagos y Nairo no se atreve a atacar al líder Yates
Los Lagos de Covadonga volvieron a dejar un gran espectáculo en su vigésima presencia como meta de la Vuelta a España. Thibaut Pinot fue el vencedor de la decimoquinta etapa de la ronda española, en un día en el que todos esperaban el ataque decisivo de Nairo Quintana, pero el colombiano de Movistar fue el gran perjudicado de la jornada, sin conocer si las piernas no le respondieron o, como en tantas otras ocasiones, no tuvo los bemoles suficientes como para lanzarse al ataque. Mientras tanto, Simon Yates sigue como líder y Nairo ya no es su gran rival en la montaña –Miguel Ángel López– ni de cara a la general, con un Valverde épico que aguantó las embestidas tras trabajar para su líder y aún fue capaz de llegar en el grupo a la línea de meta.
Una nueva fuga liderada por Iván García Cortina, del que se hace inevitable apuntar su nombre de cara al futuro, se presentó prácticamente sin opciones a los pies de los Lagos, después de dos pasos por el Mirador del Fito que calentaron las piernas de los corredores. Dos favoritos venidos a menos, Aru y De la Cruz, cedieron a las primeras de cambio, mientras que el resto apuntaban a esperar a La Huesera bajo el trabajo de Astana.
Supermán López hizo honor a su apodo y lanzó el ataque que rompió definitivamente la etapa a más de siete kilómetros de meta, obteniendo respuesta por parte de Movistar, con Carapaz y Valverde guiando a un prudente Nairo. Se esperaba la respuesta del colombiano, pero los ataques del colombiano se esfumaron antes de siquiera producirse. Un nuevo espejismo por parte de un ciclista en aparente involución.
El que sí lo probó fue Pinot, mientras que otro outsider como Enric Más lo intentaba y sacaba una sonrisa a un público español que con él y con Valverde tiene sobrados motivos para sonreír, a pesar de que entre ambos haya 15 años de diferencia.
Valverde es el líder de Movistar
Con sus dos fieles compañeros de generación, Contador y Purito, ya comentando las carreras en televisión, Alejandro continúa en el primer plano y mostrándose como uno de los mejores corredores del pelotón internacional y sin prácticamente ninguna duda, el más completo. No importan sus 38 años, que su gran objetivo sea el Mundial, ni que venga de correr y desgastarse en el Tour de Francia, Valverde siempre lo deja todo para sí mismo o, como fue el caso en esta ocasión, en favor de un Nairo Quintana que repetimos: o no tenía piernas, o su falta de ambición resulta prácticamente inexplicable.
Con Pinot destacado y saboreando la victoria, Yates lo probó en tres ocasiones, como si fuera él el que necesitaba atacar y no Quintana, quien respondía con sobriedad pero no se atrevió a dar continuidad al británico. El que sí volvió a lanzarse fue Miguel Ángel López, en un pequeño descanso, para a la postre llegar segundo a meta por detrás de Thibaut y liderar el tren de los favoritos con Yates y Valverde casi a su rueda y Nairo cerrándolo, como reflejo de una etapa en la que dejó mucho que desear.
Temas:
- Simon Yates
- Vuelta a España