Movistar domina el Mortirolo con una nueva exhibición que elimina a Roglic

• Nacho Atanes @nacho_atanes
• Redactor de Nacional en OKDiario. Antes, en deportes y SEO. ignacio.atanes@okdiario.com
• • 28/05/2019 17:32
  • Actualizado: 28/05/2019 18:50

Movistar Team sigue sumando méritos para llevarse el Giro de Italia y la etapa reina de la ronda italiana tampoco fue impedimento para una nueva exhibición de la escuadra telefónica. Con Richard Carapaz como capo y Mikel Landa en una forma espléndida, el único equipo español en la máxima categoría volvió a tiranizar la etapa, en esta ocasión con el Mortirolo como coloso, y demostró a Nibali y sobre todo a Roglic, que volvió a perder 1’23 minutos con respecto al líder. La etapa fue para otro de los destacados de este Giro, el italiano Giulio Ciccone, que culminó una etapa perfecta asegurándose la maglia azzurra y superando a Hirt en el sprint final.

La etapa más temida de cuantas se incluyen en el recorrido del Giro llegaba tras la jornada de descanso y con Movistar ante su primera gran prueba como bloque. Carapaz había demostrado su poderío camino de Como, pero la etapa con final en Ponte di Legno iba a representar una trampa en sí para el ecuatoriano, meteorología incluida . Su equipo, eso sí, se había mostrado como el más fuerte de la carrera y Pedrero, Amador y Carretero, con la duda de si Landa trabajaría o no para el actual líder del Giro.

Pedrero tomó las riendas del pelotón cuando las cosas se pusieron cuesta arriba y un día más, la respuesta del hasta ahora desconocido ciclista español fue de sobresaliente. El ataque de Nibali a pies del Mortirolo no puso nervioso a Movistar, que primero con el catalán y más tarde con Landa en versión gregario consiguieron reducir distancias y incluir en el pelotón de mando al Tiburón, anulado un día más por los telefónicos. Por el camino, Roglic había cedido del grupo principal y demostraba que todo su éxito en las competiciones previas no había hecho si incrementar su desgaste a una semana de acabar el Giro.

Con Movistar tirando a ritmo continuado, Miguel Ángel López intentó la machada en el tramo final de Mortirolo, en versión Supermán con la lluvia ejerciendo de elemento diferencial para la supervivencia de los ciclistas. El colombiano se encontró con su inseparable compañero Pello Bilbao para conducir un descenso hacia Ponte di Legno en el que Movistar encontró la ayuda de Caruso en persecución de López, quien pagaría el esfuerzo cediendo unos segundos en línea de meta.

Landa, Carapaz y Nibali, que llegaron juntos a meta, vuelven a desmarcarse de la clasificación general, con Roglic en tercera posición y dejando la puerta abierta al podio de Mikel, quien ahora se queda a un minuto del esloveno a falta de cinco etapas, tres de ellas de montaña, y la contrarreloj. España puede soñar con un podio en el que Movistar podría tener dos hombres y un ganador en la figura de Carapaz, que sigue siendo el capo del Giro.