Deportes
Jaume Roures los controlará hasta 2023

Mediapro compra los derechos internacionales de la Liga China tras no pagar en Francia

  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

Ni las deudas ni los continuos escándalos han impedido a la productora catalana Mediapro hacerse con los derechos internacionales de la Liga China. El conglomerado liderado por el empresario Jaume Roures, expulsado de Francia por no pagar, en litigios con los clubes italianos de la Serie A y con problemas para pagar los derechos de la Liga en los bares y lugares de hostelería, se ha embarcado a promocionar una competición que se encuentra en un momento crítico. Resulta curioso esta compra tras haber pedido un rescate de 300 millones al Gobierno español.

La Liga China ya no es aquella que hacía grandes dispendios hace un lustro y que era visto como el dorado para futbolistas y entrenadores. La competición entró en una crisis económica –hasta Javier Tebas mandó una carta a los clubes para fichar las gangas de la competición– que se ha visto acentuada por la crisis generada por el Covid-19. Estrellas como Yannick Carrasco, Hulk, Hamsik o Alexandre Pato han abandonado en el último año una liga en franca decadencia.

Mediapro, pese a sus latentes problemas económicos, se ha hecho con la comercialización exterior de la competición hasta 2023. Se desconoce la cifra que ha desembolsado el conglomerado de un Jaume Roures que ha dejado un pufo de casi 350 millones en la Ligue 1 francesa y que fue multado con 100 millones de euros por las autoridades galas.

La Liga China, que se inicia este próximo 20 de abril, se va a disputar en dos burbujas en Guangzhou y Suzhou y tendrá aficionados en las gradas. Mediapro espera poder colocar una competición que contará como máximas estrellas con Paulinho –ex del Barça– y Óscar –ex del Chelsea–.

Hay que recordar que Mediapro goza de buenas conexiones con el gobierno chino después de que éste autorizase la compra del 53% de las acciones del grupo al fondo chino Orient Hontai Capital. Pese a esa compra, Jaume Roures ha seguido dirigiendo a una compañía que ha perdido reputación por impagos en los últimos tiempos. Veremos qué sucede con la Liga China, donde los propietarios de Mediapro no se pueden permitirse ser vistos como unos morosos.