Deportes
Banquillazo y solo 10 minutos como revulsivo

Koeman entierra a Griezmann

Ronald Koeman terminó de sentenciar a Antoine Griezmann en el Clásico con su segundo banquillazo consecutivo. Solo le sacó al campo a falta de 10 minutos

Ronald Koeman ha sentenciado a Antoine Griezmann. El reloj acababa de dar las tres de la tarde, justo en la sobremesa, el Barça anunciaba su alineación a través de sus diversas plataformas. Neto, Dest, Piqué, Busquets, Messi… y ni rastro del 7. El francés no aparecía entre los titulares blaugrana para el Clásico. Tras el banquillazo sufrido entre semana para el partido de Champions League ante Ferencvaros, se repetía la ecuación. Koeman entierra a Griezmann y le manda un claro mensaje: ya está por detrás de Pedri.

Ante el conjunto húngaro todo hacía apuntar a que se daban unas simples rotaciones, habituales en estos contextos competitivos. Pero nada más lejos de la realidad. Ya en sala de prensa, días antes de que supuestamente tomara la decisión de quiénes saldrían de inicio ante el Real Madrid, Koeman ya dejaba entrever qué pensaba sobre el francés. Que Griezmann no esté de inicio no significa que lo vaya a estar el sábado en el Clásico, venía a decir el holandés tras el triunfo en Champions en sala de prensa. Dicho y hecho. La decisión estaba tomada mucho antes del duelo ante los blancos. Tocado y hundido.

Koeman ha sido muy crítico con Griezmann desde que se sentó en el banquillo. A las primeras de cambio, con muy poquito ruedo sobre el césped, tan solo tres partidos, el holandés ya había dado la primera sacudida al francés. Fue ante el Sevilla, en el primer partido ante un rival serio donde se torcieron las cosas. El Barça solo pudo sacar un punto tras empatar a uno (1-1). En rueda de prensa, el entrenador blaugrana no dudó en señalar al delantero, aludiendo a su falta de puntería que no correspondía con un jugador de su caché.

Aquello, con el parón internacional de por medio, dio paso a un cruce de declaraciones entre ambos. Griezmann tampoco calló tras un buen partido con su selección, Francia, dejando claro que Deschamps sí sabía donde ponerlo. Koeman de nuevo salía al paso para decir que no había problemas, que estaba todo hablado. De hecho, en Getafe volvió a darle la titularidad pero hasta ahí… Ante Ferencvaros y Real Madrid, el holandés ha enterrado a Griezmann, dejándole hueco en el banquillo. Ante los húngaros ni saltó al césped y en el Clásico tuvo los mismos minutos que Dembélé y Trincao, diez, por los que pasó sin pena ni gloria.

Cabe destacar que en los cuatro partidos previos al Clásico, Griezmann salió de inicio en todos pero no acabó ninguno de los partidos. Siempre, siempre fue uno de los cambios que ejecutó Koeman en el tramo final, siempre fue uno de los sacrificados. Ante el Celta duró solo media parte y ante el Sevilla, donde le señalaría públicamente, le sacó a la hora de partido. Y esto no ha hecho nada más que empezar…