El árbitro perdonó en dos ocasiones la expulsión al goleador Luis Suárez
Felix Brych se lució en el Camp Nou. Puede escudarse en que superó la decena de amonestaciones a lo largo del partido, pero el colegiado alemán se perdió dos acciones que podrían haber cambiado el devenir del choque. Luis Suárez, el bigoleador del encuentro, agredió a dos rivales a lo largo del partido.
El uruguayo, casi al final de la primera mitad y con Fernando Torres expulsado, soltó un patadón contra Juanfran cuando este ya había despegado un balón. En la imagen se ve la nula intención del delantero de jugar el balón.
Luis Suárez soltó en la segunda mitad la mano contra Filipe Luis cuando se estaba botando una falta propinando un puñetazo al lateral del Atlético. Brych vio la acción, pero consideró que unicamente merecía una tarjeta amarilla mostrando una actitud partidaria y casera. El Barcelona, de una manera u otra, sigue teniendo de cara los arbitrajes tanto en Europa como en España.