Djokovic escapa de la trampa de Fritz y ya está en semifinales del Open de Australia

Ganar a Novak Djokovic en el Open de Australia es uno de los retos más complicados de la historia del deporte. El tenista serbio, diez veces campeón en Melbourne, se mete en semifinales de la edición de 2024 después de superar en cuatro sets (7-6, 4-6, 6-2, 6-3) a un Taylor Fritz que lo dejó todo sobre la pista, forzó al máximo la maquinaria de su rival e incluso igualó la contienda a un set llevando el partido al plano físico. Todo para acabar viendo el enésimo resurgir de Djokovic, quien alcanzó su mejor nivel, una vez más, en el momento decisivo, y se coloca a dos partidos de su undécimo entorchado de campeón.

Djokovic no hizo un gran partido en los dos primeros sets, en los que su frustración subía a medida que el número de pelotas de break se sucedían, fallo tras fallo, con todo aparentemente a favor. Fritz sufrió los restos de Novak pero fue encontrando solución a cada ocasión en la que se veía en el alambre, en un total de 15 bolas de break levantadas en los dos primeros parciales.

En el primero, Djokovic pudo llevarse el gato al agua, haciendo gala de la solidez que le caracteriza en los tie-break, pero en el segundo, desesperado por el rendimiento de Fritz cuando la pelota más quemaba, acabó cediendo su saque contra pronóstico y dejando que la igualada llegara al partido, para sorpresa y alerta del público del Open de Australia.

Visiblemente contrariado, Djokovic llevó el encuentro al terreno mental y ahí, como tantas otras veces, pudo volver a disfrazarse de superhéroe para darle la vuelta a la contienda. Con 36 años y muchísimas victorias de impacto a sus espaldas, Novak supo cuando apretar el acelerador y se llevó al meritorio Fritz por delante, sin que este pudiera remediar la construcción del camino hacia la que es la novena victoria consecutiva del actual número uno del mundo en el duelo directo entre ambos.

Un inapelable 6-2 en el tercer set, ya con dos breaks culminados, dejaba a Djokovic con el encuentro en su mano, y si bien Fritz se repuso e intentó luchar, levantando incluso una rotura en contra en el cuarto set, la balanza estaba decantada del lado del campeón, quien, ya superior en lo físico, lo tenístico y lo mental, pudo celebrar tres horas y 48 minutos después del inicio del choque su pase a semifinales del Open de Australia 2024.