La despedida de Godín hizo llorar a sus compañeros y a todo el Wanda

Todo el Wanda Metropolitano se puso en pie para rendir homenaje a su capitán, Diego Godín, tras el partido ante el Sevilla. No se movió nadie, no querían perderse la despedida de una leyenda como el uruguayo. El central saltó al campo de nuevo por el pasillo que le había preparado toda la plantilla, con el cuerpo técnico incluido. A su espalda tenía todos los títulos logrados con el Atlético de Madrid, mientras en la pantalla se mostraban las mejores imágenes del charrúa con esta camiseta.

Aunque sin duda ese gol en el Camp Nou que le dio la Liga al Atleti será el más recordado por la hinchada rojiblanca. Ese gol fue histórico puesto que rompía con el dominio de Real Madrid y Barcelona. Tras el vídeo, Giménez le entregó una camiseta enmarcada con el número 2 a la espalda con la que posaron todos los jugadores. Posteriormente le entregaron la placa que luce en el paseo de las leyendas con los partidos disputados con el Atleti de la mano de otro defensa histórico, Luiz Pereira, ya que es uno de los futbolistas con más partidos en la historia del club.

Acto seguido los capitanes, le entregaron el brazalete de capitán a Godín «de lo gran capitán que eres». Koke Resurrección, que no pudo contener las lágrimas, se puso el brazalete de capitán que le entregó el uruguayo y le habló desde el corazón: «Han sido nueve años juntos. Te llevas el cariño de toda esta gente. Te vas derrochando coraje y corazón. Todo el Atlético te va agradecer tu forma de ser. Te quiero mucho». Tras el discurso del canterano, llegaba el momento más esperado de la tarde: la despedida de Godín que estuvo acompañado por su familia.

El capitán, visiblemente emocionado quiso tener unas palabras de agradecimiento hacia sus compañeros y cuerpo técnico. «Nunca lo vamos a olvidar. Ni yo ni mi familia ni amigos. Agradecerles a este grupo de jugadores, staff tecnico, etc, que vivimos cosas muy bonitas y otras no tanto. Somos una familia y eso ha hecho el éxito de este club. Gracias a todos mis compañeros. Los valores me los han dado mis padres, con trabajo y sobre todo con respeto que es lo más importante», dijo.

Acto seguido se dirigió a la grada: «Los jugadores podemos ir y venir, pero ustedes son el corazón y el alma de este equipo. En momento difíciles nunca nos dieron la espalda. Me han hecho sentir como en casa desde el primer día, me han enseñado a amar este camiseta. Muchísimas gracias. Hoy se despide un futbolista, pero estaré para siempre como un aficionado más. Espero que se hayan sentido orgullosos de lo que he dado en el campo. Para mí mi verdadero premio o trofeo es que ustedes se sientan orgullosos de la entrega y del cariño que me dan. ¡Forza Atleti!». Tras el acto se despidió dando una vuelta de honor al estadio, la última con la camiseta del Atleti.