El Bernabéu despidió a Piqué al grito de «¡se queda, se queda!»

Gerard Piqué fue sustituido en el minuto 49 en la vuelta de la Supercopa de España de forma sorprendente. El azote del madridismo se marchó de manera prematura con cara de dolor y escuchando las mofas del público del Santiago Bernabéu, que le cantó al unísono «Se queda, se queda».

El central azulgrana, que quedó retratado en la ida y que no ha estado mucho mejor en la vuelta, abandonó el coliseo blanco viendo como el madridismo le devolvía tantos años de provocaciones y risas. El ciclo ha cambiado para desgracia de un Piqué que se niega a aceptarlo.