El trucazo eficaz para evitar que entre frío por las ventanas

Durante los meses de invierno, de nada sirve tener el mejor sistema de calefacción si el calor se escapa por las ventanas. Si estas son antiguas, existe la posibilidad de cambiarlas por unas aislantes con marco de PVC, pero esta obra supone un gran desembolso económico. Pero no te preocupes, porque hay un truco tan sencillo como efectivo para evitar que entre frío por las ventanas gastándote muy poco dinero.

Si la vivienda está correctamente aislada, ahorrarás en calefacción y, además, mejorarás el confort acústico. Además, el impacto medioambiental también se verá reducido. A continuación te contamos en qué consiste este truco y cómo ponerlo en práctica.

Burletes en las ventanas

Los burletes son unas tiras fabricadas en diferentes materiales aislantes que se fijan en los bordes de las ventanas para sellar los huecos por los que entra el frío y se escapa el calor.

Además de mantener una temperatura agradable en el hogar, permiten ahorrar en climatización durante todo el año y actúan como aislantes acústicos. A esto hay que sumar que disminuyen la entrada de polvo y suciedad del exterior, por lo que también ayudan a mejorar la calidad del aire,

Existen burletes de distintos materiales:

• Espuma: son los más económicos pero también los que menos aíslan, así que no son la opción más recomendada.
• Goma: la goma es mucho más resistente y duradera que la espuma, aunque como contrapartida se encuentra la dificultad de amoldarse a los bordes de las ventanas.
• Silicona: los burletes de silicona son fantásticos para aislar una vivienda. Su vida útil puede llegar a los 15 años.

Los burletes son muy fáciles de encontrar en cualquier gran superficie. Colocarlos no tiene ninguna complicación, aunque es conveniente tener en cuenta una serie de recomendaciones. Se ponen a través de un adhesivo, por lo que es necesario limpiar previamente la superficie con alcohol para se quede bien pegado.

Otras soluciones aislantes

Uno de los principales puntos del hogar por los que se escapa el calor y entra el frío durante los meses de invierno es la caja de la persiana. Para evitarlo, en el mercado hay unos aislantes especiales que permiten dejar la caja completamente aislada. Al igual que con los burletes, su instalación es muy sencilla.

Otro método sencillo y barato es añadir un forro térmico a las cortinas de cada habitación. Sirve para todo el año, ya que en invierno evita que entre el aire frío hacia el interior y en verano frena hasta un 80% el paso de los rayos solares.