Soy jardinero y este es el truco infalible para evitar que las hojas de tus plantas caigan antes de tiempo
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Tener plantas en casa es mucho más que seguir una moda de Pinterest. Cambian el ambiente, el ánimo y, en definitiva, le dan vida al espacio. No importa si están en un salón, una oficina o en el cuarto: su efecto es real.
El Instituto Nacional de la Salud de Estados Unidos ha expuesto en un estudio que rodearse de vegetación mejora el estado de ánimo, reduce el estrés y puede elevar la autoestima. Pero para que todo eso suceda, primero la planta tiene que estar sana.
Una de las señales más claras de que una planta no está siendo cuidada de la mejor manera es cuando empieza a perder hojas sin razón aparente. Este efecto suele deberse a un factor que muy pocas personas tienen en cuenta: la humedad. Pero lo bueno es que los jardineros tienen un truco sencillo que puede marcar la diferencia.
El sencillo truco para evitar que las hojas de tus plantas se caigan antes
El truco de los jardineros es aumentar la humedad del ambiente, y para eso existen varias técnicas.
Una de las más conocidas es pulverizar, pero no de forma ocasional, sino con algo de criterio. Lo ideal es hacerlo a primera hora de la mañana o al atardecer, y tener claro qué plantas lo toleran bien. Las de hojas aterciopeladas, por ejemplo, no llevan bien este método. En cambio, las tropicales o las de hoja más lisa agradecen un poco de agua en suspensión. Suele ser suficiente.con hacerlo cada cierto tiempo.
Otro método eficaz es usar el humidificador. Es muy sencillo: se enciende y empieza a trabajar, elevando la humedad del ambiente sin mojar directamente las plantas. Funciona bien con todo tipo de especies y es especialmente útil para quienes viven en ciudades de clima seco.
También está el truco con piedras y agua, el que muchos llaman «modo ahorro». Se pone un plato, piedrecitas y un poco de agua, y encima, sin que toque el agua, va la maceta. El agua se evapora y genera humedad alrededor. Es simple, barato y útil. Pero si se te olvida cambiar el agua con frecuencia, puede atraer mosquitos.
Y por último, está el que parece obvio pero que pocos hacen: juntar las plantas. Al estar cerca unas de otras, generan una especie de microclima que las beneficia y se ayudan entre ellas.
¿Cómo saber si a tu planta le falta humedad?
Un aire seco es el enemigo silencioso de muchas plantas de interior. Puede que estés regando bien, que tengan buena luz, incluso que hayas elegido la maceta ideal. Pero si el ambiente está demasiado seco, lo van a sufrir las plantas.
Esto se puede detectar en las puntas secas, en las hojas que se quiebran como papel o directamente en las que se caen. Eso pasa porque la planta se deshidrata, aunque el sustrato esté húmedo.
Una buena humedad ambiental mantiene la planta más estable, mejora la fotosíntesis y ayuda a que los nutrientes lleguen bien a donde tienen que llegar. Además, previene la aparición de hongos y frena algunas plagas que aman los climas secos.