Los puentes medievales más bellos de Europa para visitar

Europa es conocida como el viejo continente, y es que conservamos en la región numerosos edificios y construcciones que bien merece la pena visitar una vez en la vida. Si te gustan especialmente las elevaciones sobre las aguas, este repaso de algunos de los puentes medievales más bellos de Europa te será de interés.

Es que en esta zona contamos con una gran cantidad y variedad de puentes imperdibles, muchos con varios siglos de existencia pero que preservan en perfecto estado las características prototípicas de la Edad Media y sus obras.

5 puentes medievales más bellos de Europa

Puente Carlos, Praga

Aunque Praga es famosa como «la ciudad de las cien torres», no menos atractivos son sus principales puentes. Entre ellos destaca especialmente el Puente Carlos, que conecta la Ciudad Vieja con el barrio Malá Strana. Imposible no pasar por él porque allí está el Castillo de Praga, el monumento más popular del país.

Puente de Aviñón, Francia

Levantado a finales del siglo XII a orillas del Ródano, el puente de Saint-Bénézet o bien «puente de Aviñón», resulta una parada obligada para los turistas como en su momento lo era para los peregrinos que iban a España e Italia.

Por supuesto, fue remodelado en diversas ocasiones a lo largo de la historia hasta que, en el siglo XVII, se decidió apuntalar solamente la estructura original, la misma que le ha llevado a ser Patrimonio Mundial de la Humanidad.

De hecho, la canción infantil «Sur le pont d’Avignon» está inspirada en esta magnífica obra medieval.

Kapellbrücke, Lucerna (Suiza)

Si nos trasladamos hasta Suiza, más concretamente hasta la localidad de Lucerna y sus puentes de madera, debemos recomendarte que pases por el Kapellbrücke, que corta el río Reuss hasta el muelle Rathausquai.

Esta construcción octogonal de 34 metros de altura data de inicios del siglo XIV y es emblemática porque siempre ha sido aprovechada para diferentes fines: cárcel, tesorería y hoy sede de la Asociación de Artillería de Lucerna.

Krämerbrücke, Erfurt (Alemania)

Llamado también «Puente de los Comerciantes», se trata del puente habitado más largo del continente europeo. Posee más de 120 metros de extensión con distintas galerías, cafés y boutiques de artesanías y souvenirs.

Ponte Vecchio, Florencia (Italia)

Símbolo de la ciudad de Florencia, el Puente Viejo fue hecho en piedra en el año 1345, a cargo de Taddeo Gaddi, que culminó así uno de los trabajos más espectaculares de la época, repleto de secretos y detalles increíbles. Sobresale el Corredor Vasariano, que va desde la parte este del puente hasta el magnífico Palacio Pitti.