Ni se te ocurra comerte la comida si pasa esto. Es muy común y extremadamente peligroso
Qué pasa cuando congelas comida a punto de caducar. Todas las respuestas a tus dudas
El arroz puede ser extremadamente tóxico: lo llevamos haciendo mal toda la vida
El invento definitivo para que la comida te dure más tiempo: cuesta sólo 3 euros y te cambiará la vida
Alarma por el aumento de este mosquito cerca de España: los expertos piden extremar las precauciones
Es muy peligroso: el aviso urgente de los expertos por esto que hacemos en la ducha
Durante los meses de verano hay muchas más moscas que el resto del año principalmente por dos razones: las buenas temperatura y la rápida descomposición de los alimentos que consumimos, lo que aumenta la presencia de microorganismos. Viven en la basura y una pareja de moscas puede tener 300 millones de crías por temporada, nada más y nada menos.
Teniendo esto en cuenta, es muy habitual encontrarnos moscas en los espacios, tanto interiores como exteriores, de la vivienda durante la época estival. Se sienten especialmente atraídas por la comida, así que todos no hemos preguntado alguna vez si podemos comerla una vez la ha tocado una mosca.
¿Qué ocurre si una mosca toca la comida?
Vamos a imaginar la siguiente situación: tenemos el vaso de bebida o el plato de comida y, de repente, nos encontramos un insecto muerto que ha caído sobre él. ¿Qué hacemos? Hay quienes creen que con quitar el insecto es suficiente, pero nada más lejos de la realidad.
La mosca de la fruta consume alimentos en descomposición y vive en basura o cualquier otro lugar donde los encuentre. Al mismo tiempo, los desechos de alimentos son ricos en microorganismos, que pueden utilizar la mosca de la fruta como medio de transporte para llegar a los eres humanos.
Por lo tanto, consumir una bebida o un alimento que ha tocado una mosca, no es en absoluto seguro. Primrose Freestone, catedrática de microbiología clínica de la Universidad de Leicester, explica en ‘The Conversation’ que este insecto puede transportar bacterias que pueden causar infecciones potencialmente peligrosas para la salud humana como la E. coli, Listeria, Shigella o Salmonella, entre otras.
Cuando una mosca de la fruta aterriza en la comida, empieza a explicarla en busca de alimento. Si quiere comérsela, lo primero que va a hacer es vomitar saliva sobre la superficie. Y es que como no tienen dientes, necesitan licuar la comida con su saliva para poder succionarla y tragarla.
Este proceso apenas lleva unos pocos minutos. La mosca de la fruta incluso puede defecar en la comida mientras la está explorando. Teniendo todo esto en cuenta, si una mosca se para en nuestra comida, lo más recomendable es tirarla.
Ahora bien, si nos damos cuenta inmediatamente, nada más la mosca pararse en el plato o en el vaso, no le ha dado tiempo de nada. En este caso, no es necesario tirar la comida, sino que basta con retirar la mosca de la comida.