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¿Cómo saber si las conservas están malas?

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Las conservas son muy consumidas y populares, a las que podemos recurrir en cualquier momento y lugar. Si por algo se caracterizan las conservas es que duran mucho tiempo en perfecto estado ya que la lata hermética y sellada al vacío protege los alimentos, pero esto no significa que no puedan ponerse malas.

Una de las principales razones por las que este tipo de alimentos se pueden echar a perder es un defecto de fábrica. Si la lata no está bien sellada, es muy probable que en cuestión de días no se puedan comer.

Hay una serie de señales externas que nos pueden indicar que la comida enlatada no se encuentra en buenas condiciones. Una de las más obvias es que la lata tenga algún golpe o abolladura. Por supuesto, si la tapa se mueve hacia arriba y hacia abajo al presionarla es una señal clara de que algo no va bien.

Conservar los alimentos enlatados en un espacio con un grado de humedad alto puede hacer que la lata se oxide. A todo esto hay que sumar que, si vamos a comer las conservas y vemos que la lata está hinchada, es porque la comida del interior se ha congelado y expandido.

Señales de que las conservas están malas

Hay veces en las que la lata está en perfecto estado y, sin embargo, los alimentos del interior no están en condiciones aptas para su consumo. ¿Cómo podemos saberlo? Prestando atención a algunos de estos signos.

Cuando hay bacterias anaerobias dentro de la lata es porque se ha acumulado gas, así que, cuando vamos a abrirla, el alimento saldrá como una explosión. Cuando esto ocurre, lo más normal es que nos demos cuenta de que la tapa está hinchada antes de abrirla.

Si al abrir la lata se produce un silbido, también es una advertencia clara de que la conserva no se puede comer. Un silbido suave es normal, pero una fuerte es una mala señal.

Si observamos burbujas al abrir las lata es porque hay bacterias en el interior. Las burbujas son un indicativo claro de algún tipo de fermentación. Otra señal de actividad bacteriana es la presencia de espuma.

Uno de los principales riesgos de comer alimentos enlatados en mal estado es el botulismo. Se trata de una intoxicación alimentaria de carácter grave provocada por una toxina que ataca al sistema nervioso. Los síntomas más frecuentes son: dificultad respiratoria y parálisis muscular.