Emilia Landaluce lo dice claro en su nuevo libro: «No somos fachas, somos españoles»
Emilia Landaluce ha escrito un libro contra el tópico que encuaderna la mitología del independentismo. Quizá, por eso, ha decidido edificarlo a partir de la palabra «facha». Un término que, por usado como arma arrojadiza en todo tipo de afrentas, en España funciona como terapia de choque cuando los argumentos se imponen al folclore. ‘No somos fachas, somos españoles’ disecciona el antes, el ahora y el mañana del procés a base de fundamentos históricos.
Es una concatenación de antecedentes, hechos actuales y proyecciones de cara al futuro «para ganar con razones objetivas todas las batallas dialécticas del bar», en palabras de la autora. Un manual histórico de consumo sencillo —el lector sabrá ponerle causas y consecuencias a conceptos tan importantes como los Decretos de Nueva Plata– que también es un pormenorizado manual periodístico.
La actualidad pura y dura complementa la rigurosa investigación histórica sobre la que Landaluce ha basado su libro. Más que incidir en el golpe de Estado del 1 de octubre de 2017 —que también lo hace—, la autora establece el inicio de todo una semana después: el día 8. Entonces, casi un millón de personas salieron a las calles de Barcelona para insistir en que Cataluña y España son lo mismo.
El grito que protagonizó aquella marcha de la mayoría constitucionalista es el principio y el final de este libro: «No somos fachas, somos españoles». Emilia Landaluce repasa los hechos para demostrar que el discurso de los líderes separatistas es una «auténtica mentira».
A partir de ahí, hace un recorrido por los hechos más importantes que han estado asociados al principal problema institucional que padece España en estos momentos: Podemos y el independentismo, el racismo nacionalista, los atentados de Barcelona y Cambrils, la aplicación del artículo 155 y la aparición en forma de discurso de Felipe VI.
Hechos que propiciaron una de «las principales esperanzas» que Emilia Landaluce ve en todo este conflicto: la España de los balcones. La autora cree que, además del discurso del Rey, el símbolo de la enseña nacional en las casas particulares de toda España fue el carburante fundamental para que el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se decidiera a aplicar el artículo 155. Un libro, en definitiva, para quien quiera saber más de lo que ha acontecido en torno a este problema que sigue sin tener una solución a la vuelta de la esquina.