Comunidad Valenciana
GENERALITAT VALENCIANA

Sánchez niega a Mazón un fondo de 2.500 millones mientras a Ximo Puig le dio anticipos por 5.000

La no aprobación de los Presupuestos del Estado de Sánchez hace perder a la Generalitat Valenciana 165 millones al mes

El Gobierno del socialista Pedro Sánchez concedió sin rechistar a los Ejecutivos valencianos del socialista Ximo Puig, hasta 2023, un total de 5.000 millones de euros en concepto de anticipos de deuda. Por el contrario, desde el PSOE de Pedro Sánchez y su Gobierno, se critica ahora que el Consell de Mazón pida tanto anticipos como el Fondo de Liquidez Extraordinario, lo que se conoce como el Extra FLA, por 2.495 millones. Ambas herramientas son ahora mismo imprescindibles para pagar a proveedores, no ya a largo, sino a un muy corto plazo.

Se da la circunstancia de que cuando los Gobiernos de Ximo Puig solicitaron esos mismos anticipos no tenían ante sí la ingente tarea de emprender una reconstrucción como la que el actual Ejecutivo de Carlos Mazón afronta a consecuencia de la DANA. Por ello, ahora, la cuestión no son sólo los anticipos, sino también el inexplicable retraso del Gobierno de España a la hora de conceder el Fondo de Liquidez extraordinario (Extra FLA). Un retraso de seis meses cumplidos ya, desde diciembre de 2024, que no se había producido en 12 años.

Así, mientras que el Gobierno de Sánchez jamás puso trabas al de Ximo Puig para dotarlo de instrumentos de financiación, mantiene ahora al de Carlos Mazón sometido a una «asfixia económica», como se ha denominado desde el propio Consell, de una gravedad extrema. De modo que si antes de este 7 de julio no llega ese extra FLA, hay proveedores que pueden quedarse sin cobrar.

En este sentido, la vicepresidenta primera del Gobierno de Carlos Mazón y consellera portavoz, Susana Camarero, ha advertido que el Gobierno valenciano «no pide sistemáticamente» al de Sánchez, sino que sólo hace «reclamar lo propio». «No estamos pidiendo nada que no corresponda a los valencianos», ha afirmado Susana Camarero.

El Fondo de Liquidez Autonómica, lo que se conoce como el FLA, es una línea de crédito creada hace ahora 13 años, en 2012. Y está concebida para que el Estado preste dinero a las autonomías, de modo que éstas no tengan que sacar su propia deuda a los mercados y pagar por ella precios abusivos.

En estos 12 años, la Generalitat Valenciana, sea cual fuera su color y el del Gobierno de España, no ha tenido nunca problemas para recibir esos fondos. Ahora, sí. Desde la izquierda no sólo se intenta justificar el retraso del Gobierno de Sánchez, sino que, además, se argumenta esa negativa bajo explicaciones tan peregrinas como que si Mazón no hubiera bajado impuestos a todos los valencianos no lo necesitaría. Cuando una cosa y otra nada tienen que ver. Sobre todo, en una Autonomía que acaba de sufrir los devastadores efectos de una DANA y en la que más que en ninguna otra sus habitantes necesitan un alivio fiscal.

El FLA es especialmente crucial precisamente en las situaciones críticas de las comunidades autónomas. Y ésa es la situación de la Comunidad Valenciana tras la riada del 29 de octubre.

Camarero ha recordado también que las entregas a cuenta del pago de los tributos, a causa de no haberse aprobado los Presupuestos Generales del Estado (PGE), están «desactualizadas»: «Perdemos cada mes 165 millones de euros», ha asegurado. Y subraya que esas cantidades, al igual que los anticipos de liquidación, forman parte del «dinero que les corresponde a los valencianos». «Faltaría más que no podamos pedir nuestro dinero», ha agregado a este respecto Susana Camarero.