Las peripecias de la Dama de Elche reclamada décadas: Iceta rechazó devolverla con un informe sin firma

• Ignacio Martínez
• ALICANTE
• Responsable de OKDIARIO en la Comunidad Valenciana
• • 07/10/2024 14:33
  • Actualizado: 07/10/2024 14:33

El presidente de la Generalitat Valenciana el popular Carlos Mazón ha arrancado de Pedro Sánchez una de las más importantes reivindicaciones históricas de la Comunidad Valenciana y, en particular, de la ciudad de Elche: el retorno de la Dama, la seña de identidad más reclamada por la ciudad, alejada de cualquier atisbo de independentismo y de la que nunca ha podido disfrutar con continuidad Elche. El último intento, el del actual alcalde de Elche Pablo Ruz, se saldó con un informe sin firma del Ministerio de Cultura, que entonces dirigía Miquel Iceta, desaconsejando su vuelta. Con anterioridad, La Dama de Elche sólo había vuelto a esa ciudad en dos ocasiones. Una, en 1965. La otra, en 2006.

La importancia de la Dama de Elche para la Comunidad Valenciana y para la tercera ciudad de esta autonomía es enorme. La negativa del Gobierno de España este 2023 para que la escultura se mostrara en Elche fue respondida por Mazón en un discurso desde la tribuna de oradores de las Cortes Valencianas el 22 de noviembre de 2023 en el que acentuó que «si en vez de Dama de Elche se llamara Dama de Llobregat ya habría informes avalando su vuelta».

De hecho, la vuelta de la Dama era el punto 30 de las 56 necesidades de la Comunidad Valenciana «que no pueden esperar más». Formaba ya parte del texto original que Carlos Mazón remitió a Sánchez días antes de su visita y también a los tres grupos parlamentarios en las Cortes de la Autonomía el día del debate de Política General. 

Este viernes, en su visita a Sánchez, Carlos Mazón lucía una corbata con el icono de la Dama de Elche. Toda una declaración de intenciones ante el mismísimo presidente del Gobierno. Si la política son gestos, el de Carlos Mazón era no ofrecía lugar a dudas: la vuelta de la Dama a Elche, ya.

Un hallazgo casual

El descubridor de la Dama de Elche fue Manuel Campello Esclapez. Un joven que labraba en La Alcudia de Elche para desarrollar labores agrícolas mientras sus familiares descansaban de las tareas. Dio con una piedra, que al sacarla resultó ser una figura. Otro jornalero, Manuel Maciá, acabó de desenterrarla.

La Dama de Elche, datada entre los siglos V y IV antes de Cristo, representa a una Dama íbera ataviada con collares y tocado. En origen estaba policromada. Su datación se debe en gran medida a Alejandro Ramos Folqués, padre de Rafael Ramos Fernández. Dos gran investigadores y personas claves en el conocimiento del yacimiento de La Alcudia, pero sobre todo en lo que hasta hoy se conoce sobre la Dama de Elche.

Al Louvre por 4.000 francos

El hallazgo de la Dama de Elche trascendió a través de la prensa. Y llegó a oídos del arqueólogo arqueólogo e hispanista francés Pierre Paris. Este último, envió una imagen al Museo del Louvre, que decidió adquirirla por un montante de 4.000 francos franceses de la época, equivalente a poco más de 4.200 euros de hoy. Pierre Paris tuvo que adelantar ese montante a través de un préstamo, mientras El Louvre recogía el dinero para hacer frente a tal gasto. La escultura salió de Elche hacia Alicante el 30 de agosto de hace 127 años: en 1897. En el puerto de esta última ciudad fue embarcada hacia Marsella.

En ese viaje comenzaron las peripecias de la Dama de Elche. Primero, en el Louvre. Luego, en el Museo del Prado. Más tarde, en el Museo Arqueológico Nacional (MAN). Pero sólo de modo efímero en Elche. En concreto, en 1965 y en 2006.

La venta de la Dama de Elche no tuvo gran repercusión a nivel nacional por coincidir con otros hechos que protagonizaron las portadas de la prensa casi en paralelo: el asesinato de Cánovas el 7 de agosto de ese mismo 1897 y la guerra de Cuba.

La Dama de Elche retorna a España

En 1935, durante la II República y después de un infructuoso intento en 1928, bajo la Dictadura de Miguel Primo de Rivera de recuperar la Dama, se abrió una puerta para el retorno de la escultura. Pero, no se produjo hasta 1941, junto a otras obras igualmente relevantes. Aquella vuelta, en plena II Guerra Mundial originó en una crisis del Museo del Louvre con el del Prado. Pero la Dama de Elche retornó a España.

La primera de las obras en llegar fue la Inmaculada de Murillo. Un gesto de buena voluntad de Petain hacia Franco antes de que se rubricara definitivamente el acuerdo. Porque Franco había mantenido la neutralidad de España en el conflicto.

La Dama estuvo en el Museo del Prado hasta 1971. Con anterioridad, había vuelto a Elche en 1965 con motivo del séptimo centenario de otra joya ilicitana, en este caso inmaterial: el Misteri. En 2006, la entonces ministra de Cultura Carmen Clavo decidió devolverla temporalmente a Elche para que presidiera la inauguración del Museo Arqueológico y de Historia de Elche.

Un «no político»

Y, desde entonces, ha sido reclamada infructuosamente por la ciudad de Elche. De hecho, el actual alcalde Pablo Ruz exigió su retorno nada más llegar a la Alcaldía. Y el Ministerio de Cultura, entonces dirigido por Miquel Iceta, rechazó esa posibilidad, porque el informe de los técnicos era negativo. El alcalde de Elche preguntó entonces quién firmaba ese informe, porque no llevaba rúbrica. Y calificó la negativa de Iceta de un «no político».

La Dama de Elche había sido reiteradamente reclamada desde la ciudad. Incluso durante el franquismo. En los años 70, de la pasada centuria, se acentuó ese movimiento reivindicativo, al que se sumó Alicante y la Comunidad Valenciana.

Reproducciones de la Dama se pueden encontrar en la provincia de Alicante y en la de Valencia. El Ateneo de la capital de la Comunidad Valenciana cuenta con una escultura que la representa, por ejemplo. Era la manera de poner en evidencia que la Comunidad Valenciana jamás la ha olvidado.

«Nadie la va a respetar mejor»

Este viernes, Carlos Mazón ha arrancado de Pedro Sánchez el compromiso para que la Dama volviera a Elche: «Nadie la va a respetar mejor que nosotros», dijo ese viernes el presidente de la Generalitat Valenciana que lucía una corbata con la imagen de la escultura. Falta por saber, como adelantó Carlos Mazón, si esa vuelta es para que repose de donde nunca debió salir, Elche. O bien de modo transitorio.

Ahora, una comisión de expertos del Ministerio y de la Comunidad Valenciana debe ser elegida para estudiar, cómo y cuándo se produce ese retorno. Si es de modo definitivo, el Gobierno pagará una deuda histórica con este territorio. Pero, muy especialmente, con la ciudad de Elche.