Bernabé sobre el silencio del Gobierno con Mazón: «La Policía no manda comunicados permanentemente»

La delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana la socialista Pilar Bernabé se ha escudado en la Policía de modo reiterado este martes para justificar lo injustificable: que el Ejecutivo de Pedro Sánchez ocultara durante cinco días, desde este 26 de marzo hasta el lunes 31, la detención de un joven independentista por amenazas al presidente de la Generalitat Valenciana Carlos Mazón: «La Policía no manda comunicados permanentemente cada vez que detiene a alguien», ha llegado a manifestar Pilar Bernabé este martes.

El asunto del silencio del Gobierno sobre la detención del joven independentista que supuestamente amenazaba a Mazón ha constituido un completo escándalo entre la opinión pública valenciana. Y es el tema de conversación en la calle y en los bares. Nadie entiende como el Gobierno de un país como España no ha difundido durante cinco días la detención de quien presuntamente amenazaba hasta con la muerte al presidente de una comunidad autónoma.

El caso es gravísimo. La Policía Nacional había detenido este 26 de marzo a un joven independentista de 30 años como presunto autor de una serie de mensajes en redes sociales a Carlos Mazón que incluían frases como «estás muerto» o «vamos a pegarle un tiro entre ceja y ceja a Mazón», siempre escritos en valenciano.

La detención se produjo este 26 de marzo. El 28, pasó a disposición judicial. Pero no ha sido hasta este lunes 31 de marzo y a raíz de que la prensa conociera el tema entre bambalinas cuando la detención del individuo que amenazaba a Mazón ha trascendido a la opinión pública.

Es más, la detención jamás fue hecha pública a pesar de tratarse de un caso que afectaba en primera persona al presidente del Gobierno valenciano y de que, en estos casos, la difusión de la captura ejerce un efecto disuasorio. El Gobierno lo ha ocultado. Una frase que Pilar Bernabé ha evitado manifestar en todo momento. La delegada de Sánchez en la Comunidad Valenciana se ha limitado a condenar las amenaza, ha felicitado a la Policía y ha animado a que se denuncie casos como éste. Pero ni una sola frase pidiendo perdón ni explicando un escándalo de dimensiones gigantescas.

Desde el primer momento, Pilar Bernabé se ha escudado en la Policía. La primera vez, cuando ha criticado haber visto algún comentario «precisamente del Partido Popular», en que se le exigía a ella «que garantice la seguridad» y que es la principal tarea de la una delegada del Gobierno.

Pilar Bernabé tampoco ha efectuado la más mínima autocrítica acerca de por qué no hizo pública la delegación del Gobierno ni el Ejecutivo una nota de prensa informando de la detención, escudándose de nuevo en la Policía. Y, mucho menos, acerca de que el PP haya señalado al PSPV y a Compromís por crispar el ambiente: «Aquí, quién crispa el ambiente es quién no quiere escuchar a la ciudadanía».