Ciencia
Carrera espacial

¿Cuántas veces puede despegar Starship al año? Lo que dice la nueva autorización

Son conocidos los retos de la empresa SpaceX en el espacio. Su nave-cohete Starship está preparada para despegar.

SpaceX prueba un cohete reutilizable

SpaceX prueba con éxito el spainsat

Elon Musk y SpaceX, planes colonizar Marte

  • Francisco María
  • Colaboro en diferentes medios y diarios digitales, blogs temáticos, desarrollo de páginas Web, redacción de guías y manuales didácticos, textos promocionales, campañas publicitarias y de marketing, artículos de opinión, relatos y guiones, y proyectos empresariales de todo tipo que requieran de textos con un contenido de calidad, bien documentado y revisado, así como a la curación y depuración de textos. Estoy en permanente crecimiento personal y profesional, y abierto a nuevas colaboraciones.

SpaceX siempre ha hecho noticia por sus ambiciones descomunales, pero esta vez no ha sido Elon Musk el que levantó titulares con un tuit, sino la propia FAA (Administración Federal de Aviación de Estados Unidos). La agencia autorizó a la compañía a multiplicar por cinco el número de lanzamientos anuales de Starship desde la base de Boca Chica, en Texas.

Hasta ahora, SpaceX solo podía realizar cinco vuelos al año desde ese lugar. Con la nueva autorización, el límite crece a 25 lanzamientos anuales, un salto que marca un antes y un después en el programa de cohetes más grande y potente jamás construido.

Lo que permite exactamente la licencia

El permiso no se queda en el simple despegue. La FAA incluye en el paquete la posibilidad de realizar hasta 25 aterrizajes del booster Super Heavy (la primera etapa) y 25 aterrizajes de la nave Starship (la segunda etapa). En otras palabras: cada vuelo podría culminar, si todo sale bien, con dos retornos exitosos.

Un detalle curioso es que la autorización también contempla las operaciones nocturnas, pero con una condición: solo tres de los lanzamientos anuales pueden realizarse de noche, y sus aterrizajes deben hacerse en plataformas flotantes en el mar, nunca en tierra firme. El motivo es sencillo: se busca reducir el impacto de ruido y luz en la zona natural que rodea a Starbase.

¿Por qué se tardó tanto en aprobarlo?

No es que SpaceX no lo hubiera pedido antes. El aumento en la cadencia de vuelos requería una evaluación ambiental más detallada, y ese proceso llevó meses. La FAA abrió un periodo de comentarios públicos, organizó audiencias y revisó informes sobre ruido, fauna, contaminación lumínica y residuos.

Al final, la conclusión fue clara: el impacto adicional sería “no significativo”. Esa frase, aunque burocrática, es clave porque significa que el regulador no ve riesgos graves en permitir más vuelos, siempre y cuando se cumplan las medidas de mitigación impuestas.

Restricciones y obligaciones

La autorización llega con compromisos para SpaceX. Entre ellos:

Estas condiciones son la manera en que la FAA intenta equilibrar dos fuerzas opuestas: el empuje de la innovación espacial y la protección de un ecosistema costero que ya vive bajo presión.

Lo que significa para SpaceX

Pasar de cinco a veinticinco lanzamientos al año no es un simple cambio de número: es la diferencia entre un programa experimental y una campaña de vuelos casi rutinaria.

Con esa cadencia, SpaceX podría ensayar nuevas versiones del cohete cada pocas semanas, probar sistemas de aterrizaje, ensayar acoplamientos orbitales y acumular experiencia con la reutilización de ambas etapas. En pocas palabras, acelerar el camino hacia convertir Starship en un sistema confiable y reutilizable, un paso indispensable para cumplir los contratos con la NASA y, en el futuro, las ambiciones de llevar humanos a Marte.

Las críticas y las dudas

No todo es entusiasmo. Varias organizaciones ambientales han mostrado su preocupación por el aumento de lanzamientos. Temen que la caída de restos tras fallos, algo habitual en los primeros vuelos de prueba, afecte a ecosistemas frágiles, desde la costa texana hasta regiones lejanas como el Pacífico, donde algunas trayectorias podrían dejar fragmentos en el mar.

Aun así, la FAA y otras agencias como la NOAA concluyeron que los riesgos son manejables y que SpaceX ha tomado medidas para reducirlos.

¿Qué esperar en los próximos años?

Si SpaceX logra aprovechar al máximo estos 25 lanzamientos, podríamos ver una Starship despegando prácticamente dos veces por mes. Eso abriría la puerta a:

Pero también hay que ser realistas: SpaceX aún está lejos de cumplir con esa cadencia. Alcanzar 25 lanzamientos en un año supone un desafío logístico, técnico y económico enorme. Y aunque la licencia lo permite, dependerá de la compañía demostrar que puede sostener ese ritmo sin sacrificar seguridad.

En resumen

Es una apuesta fuerte que refleja tanto la confianza en la capacidad de la empresa como el deseo de Estados Unidos de mantener el liderazgo en exploración espacial. Al mismo tiempo, deja abierta la discusión sobre hasta qué punto estamos preparados para convivir con una cadencia tan alta de vuelos de un cohete de estas dimensiones.

Lo que está claro es que Starship ya no es solo un experimento futurista: con esta autorización, se acerca un poco más a convertirse en un sistema de lanzamientos frecuentes, capaz de cambiar el rumbo de la exploración espacial en esta década.

Lecturas recomendadas

SpaceX Starship

Impacto programa lanzamiento Starship