Cataluña
Cataluña

Torra pide no suspender a un mosso que ayudó en la fuga de Puigdemont porque es escolta suyo

Xavier Manso formaba parte hasta ahora del equipo de escoltas del propio Torra

El expresidente de la Generalitat Quim Torra ha pedido por carta al conseller de Interior del Govern en funciones, Joan Ignasi Elena, que revoque las medidas adoptadas contra un agente de los Mossos d’Esquadra acusado de ayudar a huir al expresidente catalán Carles Puigdemont tras el acto del pasado jueves en Barcelona. En la misiva, Torra expresa su «preocupación y desacuerdo con la decisión de suspender de empleo y sueldo al agente del Cuerpo de Mossos d’Esquadra Xavier Manso» durante sus vacaciones.

Xavier Manso formaba parte hasta ahora del equipo de escoltas del propio Torra, según reconoce en la carta, y «ha demostrado ser un profesional comprometido, eficiente y con una conducta impecable en todo momento», de manera que el expresident nunca ha tenido «ninguna queja ni motivo para dudar de su ética laboral».

«Es por esto que considero la decisión tomada sorprendente, improcedente e injusta», añade la carta, en la que pide a Elena que «revise esta decisión con la máxima urgencia» y permita a Manso su «reincorporación inmediata» al equipo de escoltas de Torra, que está convencido de que esta «medida disciplinaria ha sido un error».

Inhabilitación de dos años

Los agentes de los Mossos d’Esquadra detenidos por colaborar en la fuga de Carles Puigdemont podrían ser inhabilitados dos años si el juez de instrucción les imputa un delito de omisión del deber de perseguir delitos. La orden del juez Pablo Llarena era clara: había que detener al ex presidente de Cataluña fugado de la justicia desde hace siete años. La policía autonómica catalana debía diseñar un dispositivo para ello. Sin embargo, se les ha escapado pese a dar un mitín multitudinario y pasear por las calles de Barcelona. Tal y como informó OKDIARIO los días previos a la vuelta de Puigdemont, había mossos que protegerían al prófugo y uno de ellos hasta le ha ayudado a huir en su propio coche.

Carles Puigdemont ha cumplido su promesa de volver a España arriesgándose a ser detenido. El ex presidente no ha ocultado que pisaría de nuevo suelo español y ha organizado un mitín en el Arco del Triunfo horas antes de la sesión de investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat. Los agentes tenían la hora y el lugar donde se celebraría este acto en el que el prófugo de la justicia estaría presente, pero pese a ello no han logrado capturarle. Tras pronunciar un breve discurso de cinco minutos, Puigdemont se ha marchado en un coche blanco aparcado en el paseo Lluís Companys. Los Mossos d’Esquadra han vinculado este vehículo a un agente del cuerpo autonómico que ha sido detenido de inmediato y puesto a disposición judicial, para ser liberado poco después. Otro mosso más fue detenido el mismo jueves.

El agente que dispuso su coche para la operación parece ser que no era un desconocido para los líderes independentistas. La actual presidenta de Junts, Laura Borràs, ha calificado de «patriota y ejemplar» a este agente. Sin embargo, su actuación contraria a la orden judicial vigente podría incardinarse en un delito de obstrucción a la justicia y omisión de la obligación de perseguir delitos. El primer delito aparece tipificado en el Cógido Penal como las diversas actuaciones dolosas que se ejecutan durante un procedimiento judicial. Y el segundo es el que comete una autoridad o funcionario que, faltando a la obligación de su cargo, deja intencionadamente de promover la persecución de los delitos de los cuales tenga noticia o de sus responsables. Esta persona podría incurrir en la pena de inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de seis meses a dos años.