Puigdemont expulsa a su portavoz parlamentario por presunto acoso sexual
Esta mañana, por sorpresa, Eduard Pujol había presentado su renuncia al escaño que ocupaba en representación del partido de Carles Puigdemont
Junts per Catalunya, el partido del ex presidente de la Generalitat Carles Puigdemont, ha expulsado de sus filas al hasta hoy portavoz parlamentario Eduard Pujol. Los motivos, según fuentes de la formación separatista, se deben a las denuncias recibidas contra su líder en el Parlament por presunto acoso sexual dentro del ámbito del mismo partido.
A primera hora de este lunes, tras reunirse con la dirección del grupo parlamentario de Junts per Catalunya, Eduard Pujol trasladaba un escrito en el registro del Parlament en el cual renunciaba a su escaño en el Parlamento catalán. En ese momento, mediante una breve nota, JXCat alegaba «motivos personales» en su baja.
Sin embargo esos motivos personales con los que ha justificado su salida del legislativo catalán el político separatista serían, en realidad, un seguido de presuntos casos de acoso sexual con colaboradoras del JXCat. Así lo confirman fuentes del partido independentista que, en todo caso, aseguran que «no nos corresponde a nosotros juzgar los posibles hechos delictivos». Sin embargo animan a las afectadas «a denunciar».
Pujol, ex director de la emisora líder en Cataluña, RAC1 del Grupo Godó, fue uno de los fichajes estrellas de Carles Puigdemont en las últimas elecciones al Parlament. Su nombre formó parte de la terna para sustituir al ex presidente cesado, cuando finalmente eligió a Quim Torra. También se especuló con su entrada en el Govern como portavoz. Finalmente decidió quedarse como jefe de filas en el Parlament.
El ya ex diputado, que antes de incorporarse a JXCat no había tenido ninguna experiencia con la política de partido, era uno de los hombres fuertes del nuevo proyecto político de Puigdemont y el preso Jordi Sánchez. Pujol se había caracterizado por un carácter duro con reproches constantes a los periodistas y al resto de grupos de la oposición.
Su expulsión del partido se produce nada más conocerse el presunto delito que habría cometido y justo después de presentar su renuncia al escaño alegando motivos personales, intentando así que pasara desapercibida. Cabe recordar que otra dirigente de Junts per Catalunya, Laura Borràs, está siendo investigada por el Tribunal Supremo por presunto amaño de contratos.
El acoso sexual no es nuevo en la política catalana. Hace unos meses la presunta actuación de un colaborador del ex consejero de Asuntos Exteriores, Alfred Bosch, obligó al que fuera responsable de la diplomacia catalana a abandonar su cargo. Una investigación interna determinó que sí se habían producido esos abusos pero no se le castigó. También un ex delegado de la Generalitat está acusado de unos hechos similares.