La psicóloga ‘Supernanny’ dicta sentencia y avisa a los padres que hacen esto con sus hijos: «Bronca»


Conseguir que los hijos saquen buenas notas no siempre es cuestión de estudiar más horas ni de supervisar sus deberes al detalle. De hecho, como explica la psicóloga Rocío Ramos, conocida por su trabajo en programas como «Supernanny», «los padres se tienen que implicar lo menos posible». Esta afirmación puede resultar sorprendente para muchos, pero según la experta, intervenir en exceso no sólo es innecesario, sino que puede ser contraproducente; «además genera es de las cosas que más bronca genera entre padres e hijos».
La psicóloga afirma que los niños deben enfrentarse a sus responsabilidades escolares de manera autónoma. Esto no significa dejarlos completamente solos, sino acompañarlos a modo de guía, no de control absoluto. Esta estrategia permite que los niños primero intenten resolver los ejercicios por sí mismos, fomentando la autonomía y la confianza en sus capacidades.
¿Cuánto deben implicarse los padres en los deberes?
@cope_es 📑¿Hasta dónde deben implicarse los padres en los deberes de sus hijos? ✍¿Deben llevar los niños los deberes mal hechos o es mejor hacerlos con ellos? 📋La psicóloga, Rocío Ramos, Supernanny, responde a estas preguntas en @herreraencope, con Jorge Bustos, en este primer día de vuelta al cole para muchos #herreraencope #educacion #vueltaalcole #deberes #padres #psicología ♬ sonido original – COPE
El valor de este método radica en que hacer los deberes sin ayuda de sus padres permite a los niños desarrollar habilidades cognitivas y hábitos de estudio que no se adquieren simplemente copiando respuestas o recibiendo instrucciones. Además, la psicóloga señala que dejar que cometan errores es parte fundamental del aprendizaje. «Una cosa que tiene que ver con el aprendizaje y la asimilación de conocimiento también es enfrentarse solo a la tarea. Se aprende muchísimo mejor si yo llevo los deberes mal hechos que esto los padres lo llevan fatal», asegura.
El aprendizaje autónomo también tiene beneficios emocionales. Los niños que hacen sus deberes sin la presión constante de un adulto aprenden a gestionar la frustración, a perseverar y a desarrollar resiliencia. desafíos futuros tanto académicos como personales.
Por otro lado, la intervención excesiva de los padres puede generar dependencia y disminuir la capacidad de los hijos para tomar decisiones por sí mismos. Cuando un adulto corrige cada error o da instrucciones sobre cómo hacer cada tarea, el niño puede internalizar la idea de que no es capaz de hacerlo solo, lo que limita su desarrollo intelectual y emocional.
Otro punto importante que destaca Rocío es la comunicación entre padres e hijos. No se trata de imponer autoridad, sino de establecer un diálogo abierto y de confianza. Animar al niño a pedir ayuda cuando la necesita fomenta la iniciativa y la responsabilidad. Además, esta dinámica evita las «broncas», ya que los padres no asumen el papel de profesores.
El equilibrio entre apoyo y autonomía es esencial. Los padres pueden involucrarse de manera constructiva revisando conceptos y ayudando a planificar tiempos de estudio. No se trata de resolver problemas ni de corregir cada error, sino de enseñar herramientas y fomentar la confianza para que los niños puedan aplicarlas por sí mismos.
«Una cosa que tiene que ver con el aprendizaje y la asimilación de conocimiento es enfrentarse solo a la tarea. Se aprende muchísimo mejor si llevo los deberes mal hechos, que esto los padres lo llevan fatal. Mucho mejor el niño que lleva los deberes mal hechos y los corrige con el profe en el colegio. No se puede ser todo. Profe también, no se puede ser. Es de las cosas que más bronca genera entre padres e hijos», señala.
Aplicar este consejo requiere paciencia y confianza. No se trata de desentenderse ni de minimizar la importancia de la educación, sino de respetar los procesos naturales del aprendizaje. Éstas son algunas de las respuestas de los usuarios en la publicación de TikTok de Cope:
- «Los niños deberían hacer sus deberes dentro del colegio, con la ayuda de los maestros. Si los padres llegamos a casa después del trabajo, ¿cómo vamos a seguir trabajando con ellos? No es lo mismo que el apoyo que reciben en clase».
- «Hay profesores que, si el niño lleva los deberes mal hechos, se quejan en lugar de aprovecharlo como oportunidad para enseñar. Eso genera más frustración que aprendizaje»
- «En realidad, las tareas muchas veces parecen más para los padres que para los hijos, porque se espera que sean ellos quienes se impliquen directamente en el aprendizaje».
- «Lo ideal sería que los profesores se implicaran más en el aprendizaje, explicando y corrigiendo los ejercicios en clase en lugar de delegar esta responsabilidad en los padres».
- «Los padres deben implicarse hasta que los niños entiendan, porque muchas veces en el centro educativo no se enteran de nada, ya sea porque no prestan atención o porque el maestro no sabe explicar. Da igual la razón, el apoyo en casa puede ser necesario».