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Tapón mucoso de la embarazada: qué es y cómo se expulsa

El tapón mucoso es una barrera creada en las primeras semanas de embarazo con una función protectora. Descubre cómo y cuándo se expulsa.

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Blanca Espada

A menudo sucede que la futura madre, unas semanas después de dar a luz, comienza a escuchar sobre la pérdida del tapón mucoso: ¿es uno de los signos de que el parto está cerca? ¿Y cómo saber cuándo será el momento adecuado para ir al hospital?. Os ofrecemos ahora todos los detalles sobre el tapón mucoso de la embarazada: qué es y cómo se expulsa.

Tapón mucoso de la embarazada: qué es y cómo se expulsa

El tapón mucoso es uno de los ‘dispositivos’ mediante los cuales la naturaleza protege la salud del bebé durante el embarazo. Es una sustancia gelatinosa que cierra el canal cervical (el pequeño túnel que va desde el cuello uterino hasta su interior) bloqueando el paso de microorganismos normalmente presentes en la vagina, que no es un ambiente estéril, a diferencia del útero. Constituye, por tanto, una barrera fisicoquímica e inmunológica para contrarrestar la entrada de cualquier bacteria al útero y al saco amniótico. Incluso después de que se haya perdido el tapón mucoso, las membranas amnióticas continuarán protegiendo al bebé. Sin embargo, para limitar la proliferación de las bacterias más problemáticas (como Escherichia coli) en la vagina y el tracto urinario, es importante mantener una buena función intestinal.

¿Cómo reconocer la expulsión del tapón mucoso?

Al final del embarazo , a medida que el cuello se ablanda y dilata, el tapón mucoso se desliza hacia la vagina y sale. Se puede desprender lentamente o más rápidamente, aunque siempre se presenta como una sustancia gelatinosa y mucosa de color transparente, aunque en ocasiones puede ser rosado o marrón claro.

Se trata en definitiva de una señal totalmente fisiológica, que no debería alarmar. De hecho, es una confirmación de que todo avanza según lo previsto. El que salga con un poco de sangre (y de ahí el que tenga un poco de color), de hecho, se debe a la fragilidad de los capilares del cuello uterino, que pueden romperse debido a las contracciones preparatorias, pero si el sangrado es abundante, comparable a una menstruación, debes acudir a urgencias tan pronto como posible.

No todas las mujeres lo notan

A veces, la pérdida del tapón mucoso es tan gradual que pasa desapercibida, o puede ocurrir durante mientras nos bañamos o duchamos. Cuando ocurre, aún pueden pasar varios días antes del parto o ya es el preludio del inicio del trabajo de parto».

¿Qué significa?

La pérdida del tapón mucoso es el primer signo de que algo se mueve en el cuerpo, que las contracciones , aunque todavía no son regulares y dolorosas, están actuando sobre el cuello uterino. Especialmente en una mujer que nunca ha dado a luz, los cambios cervicales pueden comenzar unas semanas antes del inicio del trabajo de parto, que se considera iniciado solo cuando el cuello del útero ya se ha abierto un par de centímetros y, en el caso del primer hijo, cuando el cuello está completamente alisado. Si, por tanto, ves que ha caído el tapón mucoso, ¡no te apresures!. Al contrario de lo que sucede cuando las membranas se rompen, si no hay contracciones regulares, puedes esperar y no es necesario que te examinen pronto. El trabajo de parto podría comenzar poco después, pero en ese momento no habrá duda porque las contracciones serán evidentes: regulares, intensas y progresivas.

Otros signos de que el embarazo ha llegado al final

Otros signos importantes que pueden surgir en el último mes de embarazo son: la bajada de la barriga debido a la disminución del líquido amniótico y el descenso del bebé al canal del parto; pequeños calambres de tipo menstrual ; leucorrea o hidrorrea (flujo vaginal mucoso o acuoso); contracciones esporádicas e irregulares (llamadas Braxton Hicks); la aparición de calostro y un cambio en los movimientos del bebé , que se vuelven más como un estiramiento y menos animados.

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