OkBaleares
baleares

Reabiertas las cuatro playas de Palma cerradas por los vertidos provocados por la lluvia

  • Indalecio Ribelles
  • Redactor OKDIARIO en Baleares, información local de Palma, social y política en general. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

La empresa municipal de Aguas y Alcantarillado (Emaya) ha confirmado que ya se han reabierto al baño las cuatro playas de Palma cerradas este viernes por vertidos de aguas mixtas a causa de la intensidad de las lluvias caídas en la capital balear.

Emaya obligó al cierre de las playas de Cala Major, Can Pere Antoni, Ciudad Jardín y Cala Estancia. De inmediato se procedió a realizar las analíticas pertinentes hasta comprobar que los resultados de las mismas permitiesen reabrirlas al baño.

El tanque de laminación y el colector interceptante funcionaron  correctamente, logrando evitar el vertido de 35.000 metros cúbicos de aguas mixtas, aunque no fue suficiente debido a la intensidad de las lluvias caídas.

El tanque de laminación y el colector interceptante son componentes de un plan de saneamiento integral en curso. El sistema será complementado con la renovación de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) II, así como la mejora de los bombeos de la primera línea de costa hasta San Agustín.

La construcción del colector y del depósito de tormenta, que entraron en funcionamiento en noviembre del año pasado tras la conclusión de unas obras iniciadas en 2019, tiene como finalidad recoger, conducir y almacenar aguas residuales y pluviales, para depurarlas y evitar vertidos en la Bahía de Palma en caso de lluvias.

El colector es una tubería de dos metros de diámetro y tres kilómetros de recorrido que recoge las aguas residuales y pluviales desde la zona de Levante de Palma y las deriva o en el tanque o en la depuradora.

El tanque es un depósito para retener el agua de lluvia, sobre todo cuando existen episodios de precipitaciones muy intensas, que a menudo generan derrames. Por ello cumple, además, una función fundamental de reducción de la contaminación, porque recoge los contaminantes que arrastran las lluvias que se decantan en su fondo y no salen al mar.

El coste ascendió a más de 27 millones de euros y su financiación corrió a cargo de la Conselleria de Medio Ambiente a través del canon de saneamiento.