La dirección nacional de Vox confirma a Patricia de las Heras como presidenta del partido en Baleares

La dirección nacional de Vox ha confirmado a Patricia de las Heras como presidenta de Vox en Baleares y a Fulgencio Coll como vicepresidente saliendo así al paso de los rumores sobre un posible relevo como consecuencia del enfrentamiento entre el sector oficial del partido y los cinco diputados díscolos del grupo parlamentario.

En un mensaje remitido por la dirección nacional de Vox se afirma lo siguiente: «Patricia de las Heras cuenta con el respaldo de la dirección nacional de Vox, no estando cuestionada, sino al contrario, es la persona que tiene el encargo de dirigir al partido en las Islas Baleares para que sea alternativa de Gobierno». Según el mismo comunicado, «la denominada crisis [de Vox en Baleares] quedó cerrada cuando se produjo el acuerdo entre las partes afectadas en una reunión mantenida hace tres semanas».

El pasado 8 de febrero una delegación de la secretaría general de Vox mantuvo una reunión con los cinco diputados que anunciaron la expulsión del grupo parlamentario de Gabriel Le Senne y Patricia de las Heras. El fruto de esta reunión fue que los cinco diputados dieron marcha atrás con las expulsiones, que Gabriel Le Senne seguía como presidente del Parlament y que el grupo parlamentario quedaba intacto con sus siete diputados.

De estas forma se cerraba la crisis y, en teoría, se ponía fin al enfrentamiento entre el sector oficial de Vox y los diputados díscolos. Desde entonces, sin embargo, circulaba el rumor de que parte el acuerdo con la secretaría general de Vox era realizar cambios en la dirección del partido en Baleares como exigían los díscolos. Los propios diputados que protagonizaron el acto de rebeldía habían alimentado este rumor.

Ahora, la dirección nacional de Vox ha salido al paso de los rumores y ratifica en sus cargos a Patricia de las Heras como presidenta, Fulgencio Coll como vicepresidente y Antonio Gili como secretario general. En definitiva, no hay ningún cambio en el Comité Ejecutivo de Vox en Baleares.

La propia Patricia de las Heras ha confirmado a OKDIARIO que la dirección nacional del partido que preside Santiago Abascal le ha comunicado su continuidad en el cargo y que sigue siendo la persona designada para conseguir que Vox se convierta en alternativa de gobierno en Baleares.

Patricia de las Heras lamenta los rumores malintencionados sobre su relevo y asegura que en ningún momento se ha visto cuestionada por la dirección del partido.

De todos modos es evidente que se mantienen las diferencias entre los cinco diputados díscolos y el sector oficial que en el Parlament representan Gabriel Le Senne y la propia Patricia de las Heras.

Los expedientes a los rebeldes de Vox siguen su curso

La dirección de Vox reconoció en su momento que para poner fin a la crisis en Baleares y dejar en suspenso la expulsión del partido de los cinco díscolos había priorizado la necesidad de dar estabilidad a un gobierno «que se ha comprometido a trabajar por la libertad lingüística en las Islas».

Cabe recordar que el poner fin de la dictadura lingüística fue la línea roja marcada por Abascal para firmar el acuerdo con el PP que permitió la investidura de Marga Prohens como presidenta del Govern balear.

En este sentido el Govern del PP ya ha adoptado algunas medidas aunque menos de las que exige Abascal. Precisamente, una de las causas que  se expuso como desencadenante de la crisis de Vox fue las diferencias entre los dos bandos sobre la velocidad a la que deben realizarse las reformas en cuanto a la recuperación del bilingüismo.

Mientras Gabriel Le Senne y Patricia de las Heras, en connivencia con la dirección nacional, defienden una mayor celeridad en la adopción de medida contra la dictadura del catalán, los cinco diputados que protagonizaron la revuelta son partidarios de consensuar todas las medidas con el Govern de Prohens a cambio de conseguir acuerdos en otros temas.

Aunque la crisis de Vox en Baleares se ha dado por cerrada, la realidad es que los expedientes de expulsión a los cinco diputados díscolos sigue su curso si bien ha quedado sin efecto la suspensión de militancia.