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Aguirre cumple hoy un año en el Mallorca

Parece que fue ayer, pero ya ha pasado un año completo. Hoy es el aniversario de Javier Aguirre como entrenador del Mallorca. El mexicano fue presentado el 24 de marzo de 2022 con la misión de salvar al equipo del descenso en los nueve partidos que faltaban para finalizar la temporada. Cumplió el objetivo, aunque con mucho sufrimiento, y se ganó la renovación automática. Ahora disfruta de una situación más desahogada, aunque tampoco sin demasiadas estridencias, pero sus números globales son muy equilibrados: 39 partidos dirigidos, de los que ha ganado 16 y ha perdido 17.

Lo cierto es que es imposible presentar números más ortodoxos que los que acredita Javier Aguirre en el Mallorca. Ha dirigido al equipo en 39 partidos oficiales, entre Liga y Copa, de los que ha ganado 16, empatado 6 y perdido 17, marcando 46 goles y recibiendo 47. Si el club buscaba un entrenador que le diera estabilidad, sin duda ha encontrado el más adecuado.

En efecto. Consiguió evitar in extremis el descenso la pasada temporada y en esta Liga, con 26 jornadas disputadas, no ha estado ni una sola semana entre los tres últimos del Campeonato, llevando al equipo a una zona cómoda de la clasificación durante todo el curso, a falta de apenas 12 partidos para echar el telón y cuando tan sólo quedan 10 puntos para conseguir el objetivo de la permanencia. Sus números son intachables y defienden su continuidad en la isla.

Curiosamente el mexicano no podrá celebrar en los banquillos su primer año en el club ya que en el campo del Betis vio la quinta tarjeta amarilla y deberá descansar ante Osasuna. Su plaza la ocupará Toni Amor, que ya le reemplazó cuando fue expulsado tras el partido ante el Espanyol. Ha venido de un pelo, porque precisamente su segundo entrenador estaba también sancionado, pero cumplió el castigo -dos partidos- en la última jornada.

En cuanto a su futuro, sigue en el aire. Dado que el acuerdo rápido ya no va a ser posible, Aguirre ha optado por parar la negociación y esperar a que se consume la permanencia, ya que ahora sólo quiere centrarse en conseguir los 42 puntos que cree que serán suficientes para seguir un año más en Primera División. A partir de ahí luego se retomarían las conversaciones.

Las dos partes quieren entenderse y lo lógico es pensar que están condenadas a hacerlo, pero ahora mismo las dos posturas son bastantes opuestas. Aguirre y su equipo aceptaron un contrato muy modesto económicamente -para lo que es la Primera División, claro- porque apostaron por el Mallorca. Ahora quieren una mejora que les coloque más o menos al nivel del resto de entrenadores que se mueven en su misma zona y, además, pretenden conseguir dos años más.