La madre que admitió haber matado a su hijo discapacitado dice ahora que «se le murió» de fiebre en casa
La Policía continúa la búsqueda del menor vecino de Morón de la Frontera (Sevilla) desaparecido este lunes. Una investigación que cuenta con las declaraciones inconexas de la madre, que tras admitir en un primer momento que mató a su hijo y se deshizo del cadáver arrojándolo a un contenedor, sostiene ahora que «se le murió» de fiebre muy alta el pasado día 8 en su casa. La Policía no da credibilidad a esta nueva versión, aunque la mujer continúa incapaz de concretar el paradero de su hijo.
El menor, de 15 años, cuenta con discapacidad física y movilidad reducida. Su madre se encuentra en tratamiento psiquiátrico y ha sido ingresada en un centro hospitalario de Segovia a cuenta de sus alteraciones mentales, después de salir de viaje con su hijo y ser hallada a 700 kilómetros de su casa.
La mujer ha sido interrogada ya en varias ocasiones, pese a que los brotes psicóticos dificultan la labor. Algunos allegados han manifestado que la madre se desprendió en los últimos días de enseres y objetos personales.
Vistos el domingo en un hotel de Toledo
La pista del chico se pierde la noche del domingo en un hotel de Talavera de la Reina, en la provincia de Toledo, donde ambos fueron vistos por última vez. La madre fue encontrada el lunes, ya sin su hijo, en una carretera de la provincia de Segovia, donde ofreció una primera versión de los hechos en las que afirmaba que tiró al menor un contenedor de basura junto con su silla de ruedas en algún punto del extrarradio de Madrid.
Los agentes han registrado el domicilio en el que vivían ambos en Morón y ha localizado el teléfono móvil de la madre, con la pantalla fracturada, en un contenedor «relativamente» cercano.
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