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¿Vivir como el Gran Gatsby? Todo es posible

Fiestas, excesos, lujos… El Gran Gatsby, ese personaje de ficción que es sinónimo de una vida diferente a la del resto de los mortales. Pero para poder conseguir este tipo de hazañas hay que tener una casa en condiciones.  Por eso a partir de ahora, y si te sobra el dinero, podrás tener tus reuniones sociales favoritas en la mismísima casa en la que fue inspirada la película.

85 millones de razones para comprarla

Sí, por si no lo sabías la vida del lujo y las excentricidades en una vida de altos vuelos y de cuentas repletas de dinero. Pero parece ser que existe gente con este tipo de objetivos, ya que sino la casa del Gran Gatsby no se habría puesto a la venta. Eso sí, para poder pasar una vida tan envidada como la de este conocido personaje tendrás que desembolsar unos 8o millones de euros. 

Mansión vista desde las alturas

La mansión puede definirse como un impresionante castillo de estilo colonial que data del año 1928. Una extraordinaria construcción ubicada en Long Island que cuenta con unos 4.500 metros cuadrados de extensión. Toda un palacio en el que podrás encontrarte con 18 habitaciones, una bodega gigantesca y hasta un salón de cosmética. Además, si eres de esas personas a las que les gusta hacer barbacoas, el gran jardín de 300.000 metros cuadrados que incorpora el recinto se enmarca como el lugar perfecto para una reunión de amigos.

Sitio de sobra para los invitados

Si eres una persona con una vida social muy amplia, no te preocupes porque esta mansión cuenta con dos niveles con dos residencias para invitados que cuentan con piscina cubierta, casino, zona de tiro e incluso bolera. Algo así no es rechazado por ningún invitado, por muy remilgado que sea. Aunque si no termina de convencerles, siempre se puede pasar un rato juntos en las pistas de tenis o dar un paseo por los preciosos estanques de los jardines.

Entrada a la mansión

Y quién sabe… nunca viene mal un paseo en barco ¿verdad? Por eso el recinto cuenta con un muelle privado en el que poder atracar el yate para futuros viajes marítimos con gorra de capitán incluida. En conclusión, una mansión al alcance de muy pocos pero que todo curioso fan de la película con escasos millones en la cuenta puede acercarse a curiosear y quedar asombrado.