‘Pasaporte Pampliega’ muestra la otra realidad del Mundial 2018 de Rusia

El periodista Antonio Pampliega lleva el camino de convertirse en el nuevo Jon Sistiaga de Cuatro. Con su programa de reportajes ‘Pasaporte Pampliega’ nos muestra un tipo de periodismo diferente, arriesgando en cada uno de sus programas. Hoy, Pampliega, ha querido enseñarnos el lado más oscuro que se esconde tras el Mundial de Rusia 2018 que, al margen del evento deportivo más importante del mundo, esconde violencia, radicalidad o prostitución.
Rusia es un país complicado, tal y como ha enseñado Pampliega en su programa de hoy. Los ultras radicales de Rusia son los más peligrosos del mundo, y lo ha demostrado. Iniciando su reportaje con los sucesos acontecidos en Bilbao con la visita del Spartak de Mocú, ‘Pasaporte Pampliega’ nos ha mostrado un mundo oculto que va a estar detrás del Mundial.
Los ultras son más que meros espectadores, son violentos y ni la propia policía puede enfrentarse a ellos. Los aficionados rusos son auténticos fanáticos, luchadores de MMA o ex militares en muchos casos. Se citan en los bosques de la estepa rusa para pegarse y marcan los árboles por el bosque para citarse en el campo de batalla. Las autoridades dicen estar preparadas para contener a estos ultras, creando una lista de personas, que sobrepasan el centenar, con antecedentes penales. Estos aficionados no puede comprar entradas, pero ‘Pasaporte Pampliega’ ha demostrado lo fácil que es comprar una entrada en la reventa, que daría pase a estos aficionados al Mundial de Rusia 2018.
Durante el reportaje, las autoridades rusas han supervisado todo el reportaje de ‘Pasaporte Pampliega’ para controlar cada movimiento de los realizadores del programa. El reportaje no sólo se centra en los ultras violentos, también ha querido mostrar como viven diferentes colectivos como la comunidad homosexual rusa. Perseguidos por el gobierno, los ultras también los tienen entre sus cacerías.
Igualmente otro colectivo que espera el Mundial de Rusia 2018 es el de la prostitución. El propio Vladimir Putin hablaba hace unos meses de que su país tiene «a las mejores prostitutas del mundo», aludiendo a que el propio Donald Trump nada más llegar a Moscú «fue a buscar a nuestras prostitutas». Se calcula que llegarán unos 4 millones de turistas para el Mundial, y donde encontraremos más de 100.000 prostitutas.
El debate está abierto para una de las citas más importantes del año en el mundo del deporte. Negocio, deporte, violencia y prostitución es lo que llegará este próximo mes hasta el Mundial de Rusia 2018.
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