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Las mejores bandas sonoras para recordar a Angelo Badalamenti

  • Francisco-Eme
  • Soy un graduado en Comunicación Audiovisual y Publicidad, que escribe desde su pasión por y para el cine, donde también intento hacerme un hueco como guionista. "Todo lo que puede ser imaginado es real", Pablo Picasso.

Es imposible comprender el alcance de la cinematografía del director David Lynch sin un compositor de la talla de Angelo Badalamenti. El hipnótico talento para sumergirnos en sueños y mundos perversos del músico se apagó en el día de ayer, 12 de diciembre, en su casa de Lincoln Park, según lo ha contado un miembro de la familia. La fama le llegó de la mano de Lynch, con la mítica serie Twin Peaks en una asociación tremendamente fortuita, que derivó en una carrera fructífera y una de las asociaciones colaborativas más estimulantes de la historia del cine. A veces, componían juntos y otras partían de una melodía. Hoy, lejos de hacerle un obituario, el director  ha dado su particular parte del tiempo y se ha limitado a decir “hoy no hay música”.

Angelo Badalamenti junto a David Lynch (Oliver Maxwell Kupper)

Badalamenti tenía 85 años y aunque estaba retirado de la vida profesional, en el recuerdo nos quedan alguna de sus mejores bandas sonoras que permanecerán en nosotros para siempre:

‘Twin Peaks’

‘Twin Peaks’ (ABC)

“No he rodado nada, pero es como si estuvieras en un bosque oscuro con un búho de fondo y una nube sobre la luna y los sicomoros ondeando muy suavemente…”, contaba Badalamenti sobre cómo le describió el onírico director en un principio, la historia sobre el asesinato de Laura Palmer. El músico comenzó a tocar las teclas del piano y Lynch siguió relatando las sensaciones, “las notas salieron solas” recordaba. Ambos se quedaron atónitos y el cineasta sino que tenía Twin Peaks. Le dijo a Badalamenti que no cambiase ni una nota y el resto es historia.

‘Mulholland Drive’

‘Mulholland Drive’ (Les Films Alain Sarde)

Una cinta tan compleja no podía tener sino una banda sonora ecléctica, en la que los registros cambian y se disipan igual que la mente de su protagonista, pasando del consciente al inconsciente, en un resultado onírico. Una pesadilla de ilusiones, expectativas y sueños rotos. El club del silencio, donde la música sigue sonando sin banda ni cantante, donde todo es falso, sigue siendo para muchos una de las secuencias más turbias que se han rodado nunca.

‘Terciopelo azul’

‘Terciopelo azul’ (De Laurentiis Entertainment Group)

Mezclando una atmósfera completamente oscura y canciones pop, supuso la primera colaboración entre Angelo Badalamenti y David Lynch. Un escenario atemporal con una visión neo-noir que alude a la putrefacción bajo las capas de la idílica vida de anuncio estadounidense.

‘La ciudad de los niños perdidos’

‘La ciudad de los niños perdidos’ (RTVE)

No podíamos despedirnos sin, al menos, nombrar un ejemplo de Badalamenti más allá del cine de Lynch. En esta ocasión, el compositor se juntó con los directores galos Jean Pierre Jeunet y Marc Caro, en una coproducción entre Francia, Alemania y España. La ciudad de los niños perdidos cuenta la historia de cómo el malvado Krank (Ron Perlman) rapta a los niños de la ciudad para robarles sus sueños.