Tomás Rufo deja una gran faena en una anodina corrida de El Parralejo
La de este domingo acabó siendo una tarde de muy poquitas opciones de triunfo por las condiciones de los morlacos

Llegaba el turno de la corrida de El Parralejo para el cartel formado por la terna: Miguel Ángel Perera, Fernando Adrián y Tomás Rufo. Se colgaba de nuevo el cartel de «No hay billetes» el duodécimo de esta edición de la Feria de San Isidro. Pero la de este domingo acabó siendo una tarde de muy poquitas opciones de triunfo de los toros de El Parralejo. La faena más destacada fue la del último toro lidiado por Tomás Rufo, al que lamentablemente la espada le alejó del premio. Fernando Adrián dejó muy buenas sensaciones con el segundo toro y Perera no tuvo opciones.
Abrió plaza Miguel Ángel Perera ante un primer toro al que saludó por medias verónicas ajustado a tablas hasta llevarlo a los medios. Se dejó en el caballo, pero no en banderillas. A Perera fue muy difícil desarrollar la faena, ya que el animal perdía las manos desde el inicio. Se esforzó por ambos pitones pero fue imposible el lucimiento. Tuvo que tomar la decisión de abreviar al no ver opciones de triunfo. Concluyó con media estocada un tanto desprendida. Fue silenciado.
Siguió Fernando Adrián recibiendo por faroles anclado de rodillas al segundo toro de la tarde. No se empleó en el tercio de varas. Quitó por chicuelinas Tomás Rufo ganándose la primera ovación de la tarde.
Empezó la faena por alto con pases cambiados por la espalda en el tercio.
Dejó un par de series por la diestra de gran nivel. Su actuación estuvo muy limitada por la falta de fuerza del animal. Continuó toreando por muletazos con ajustados cambios por la espalda que tenían emoción, pero la faena no terminó de coger vuelo. Remató con media estocada y recibió una ovación.
Tomás Rufo recibió al tercero por medias verónicas. Se le midió el castigo en varas y dejó un buen par de banderillas de Fernando Sánchez.
El toledano empezó la faena a pies juntos, rematando por abajo, donde el toro embestía mucho mejor. Siguió por el pitón derecho, aunque le costó mucho ligar cada muletazo. La faena no cogió vuelo y abrevió tras un pinchazo. Silencio.
Miguel Ángel Perera tampoco tuvo opciones con el cuarto, que fue protestado de salida. No le dio opciones con el capote. Tampoco se empleó en el caballo ni en banderillas. Destacó un quite por chicuelinas de Fernando Adrián.
El toro no tenía ni entrega ni emoción. A base de mucho esfuerzo pudo dejar algunos muletazos de muy buen gusto. Tras no verlo claro decidió poner punto y final con media estocada un poco desprendida. Silenciado de nuevo.
Fernando Adrián lo tuvo complicado con el quinto toro de la tarde, que ya perdía las manos desde su salida. Apenas pudo saludarlo con el capote. Tampoco se empleó en el tercio de varas. Destacó el par de banderillas de Marcos Prieto.
Brindó la faena al público y empezó con mucha actitud la faena, anclado de rodillas toreando en redondo, lo que levantó las palmas de los tendidos. Poco a poco, dándole distancia, pudo sacar todo lo que tenía el animal. Se expuso mucho por intentar lucir cada muletazo. Finalizó con media estocada desprendida y fue silenciado de nuevo.
Finalizó la tarde Tomás Rufo ante un sexto toro con mayor movilidad que los anteriores. Lo midió por medias verónicas y se empleó en el caballo. Inició la faena por el pitón derecho y dejó una primera tanda de mucho temple. Continuó por el mismo pitón, ligando cada muletazo y rematando con un gran pase de pecho que levantó la ovación de los tendidos. Estuvo muy dispuesto durante toda su actuación. Siguió por naturales y lució una tanda impecable con el público metido de lleno en la faena. Cerró su actuación por trincherillas. La espada le alejó del premio. Tras un pinchazo puso punto final a su actuación con una gran estocada. Fuerte petición de oreja que no fue atendida y recibió una fuerte ovación.
Ficha del festejo:
Domingo, 1 de junio de 2025. Plaza de toros de Las Ventas (Madrid). Corrida de toros. No hay billetes. Toros de El Parralejo.
Miguel Ángel Perera: silencio y silencio.
Fernando Adrián: ovación y silencio.
Tomás Rufo: silencio y ovación.