Toros

El Fandi, Perera y Emilio de Justo cortan una oreja cada uno en Valladolid

El Fandi, Miguel Ángel Perera y Emilio de Justo se llevaron una oreja cada uno en la cuarta corrida de la feria de Valladolid celebrada este viernes con media entrada y toros de Hermanos García Jiménez, Olga Jiménez y Peña de Francia.

Abrió cartel “Sosito” para El Fandi, un animal bien presentado. El viento impidió que se luciera con el capote, pero lo hizo en banderillas con cuatro pares que hicieron vibrar al tendido. Conexión en el inicio de faena con la muleta de rodillas. Continuó cambiando de mano labrando una serie extraordinaria con la izquierda. El viento estropeó la faena. Abrevió tras un pinchazo. Palmas al diestro y al toro. 

Una oreja con petición de la segunda paseó en el cuarto, un toro con el que hizo vibrar de nuevo al tendido en banderillas y con el que destacó al natural. Mató de estoconazo y paseó premio.

Segundo de la tarde para Perera. Lo midió por verónicas mandando ya en el toro. Lo llevó largo y embebido en sus telas durante el trasteo Perera, ante un astado que mantenía el viaje y la duración. Domeñó los terrenos y las distancias para dejar una gran estructura de faena, rematando labor por estatuarios y una estocada entera. Oreja.

En el quinto dejó buenas series con la mano derecha, por la que basó su labor. Menos fondo tenía el animal, con el que fue ovacionado.

El tercero fue un buen toro de Olga Jiménez, “Filósofo”, bien presentado, con fijeza y que metía la cara muy bien en los trastos de Emilio de Justo, que se lució de capa. Predominó el manejo de la derecha durante casi toda la faena, toreando en redondo por abajo, con un animal que iba a más. Lo aprovechó también al natural, pero empañó su labor con los aceros. Pinchazo, estocada y oreja.

Cerró la tarde Emilio de Justo con un toro con el que midió por medias al principio. Muy bien en banderillas. Faena de entrega de De Justo enlazando naturales muy ligados que dieron buen sabor de boca al público. Entendió muy bien al animal, le dio su espacio y poco a poco se fueron acoplando. Una pena que no acertara en los aceros el extremeño. Ovación.