Sucesos
ATAQUE A UN AGENTE

Brutal paliza a un policía en Vallecas: identificada una familia de origen nicaragüense entre los agresores

La Policía busca a más participantes en la paliza al policía de paisano en Vallecas

Dos detenidos por la paliza brutal al policía en Vallecas: españoles de origen nicaragüense

  • Ángel Moya
  • Periodista en activo desde 1994, especializado en información de sucesos y actualidad. En OKDIARIO desde el año 2018, también colaboro en televisión y en radio.

La Policía Nacional ha identificado a más participantes en la brutal paliza que sufrió un policía fuera de servicio cuando estaba cenando en un kebab de Vallecas (Madrid). Además de los dos primeros detenidos, los agentes tienen imágenes del resto de presuntos implicados: una familia española de origen nicaragüense.

Los investigadores ya tienen identificados a los presuntos autores gracias, entre otros detalles, a imágenes como la que acompaña esta información de OKDIARIO. Los instigadores de la paliza brutal al policía fueron los miembros de una familia española con origen en Nicaragua que pidieron ayuda a más familiares y conocidos para agredir brutalmente al agente.

Los miembros de esta familia de inmigrantes habían reconocido al policía fuera de servicio de una intervención anterior, le increparon, lo rodearon y le dieron una paliza brutal en la puerta del restaurante de Villa de Vallecas.

Siete implicados en la paliza al policía

La paliza al policía tuvo lugar la madrugada del 14 de noviembre en el barrio de Entrevías (Madrid). Una vez que la familia de agresores llegaron a congregar a siete personas, rodearon al agente y comenzaron a golpearle con saña, según la denuncia de la víctima.

«¡Madero de mierda, teníais que estar todos muertos!», comenzaron a gritarle al policía y le golpearon con saña hasta que perdió el conocimiento. Mientras el policía recibía la paliza brutal los agresores le chillaban: «¡Ahora no eres tan valiente estando solo!».

Fruto de la paliza, el policía sufrió graves lesiones, llegando a perder el conocimiento debido a la violencia de los golpes. Su vida pudo peligrar de no haber sido por la rápida intervención de varios indicativos de Policía Nacional y Policía Municipal, así como de un equipo sanitario del SAMUR, que lo trasladó de urgencia a un centro hospitalario. El agente tiene varias costillas rotas.

Detenidos dos de los agresores

La Policía detuvo a dos de los agresores, un nicaragüense nacionalizado español de 37 años y un joven español de 20 años también de Nicaragua. Según consta en la denuncia formalizada por los agentes del Grupo Operativo de Respuesta (GOR) de Puente de Vallecas, el policía fue rodeado por los agresores, atacado simultáneamente por varios de ellos y golpeado de manera continuada con puñetazos, patadas e incluso pisotones en la cabeza y el costado, lo que evidencia un absoluto desprecio por la vida humana y la autoridad del Estado.

UFP: «Los próximos, los ciudadanos»

Desde el sindicato policial Unión Federal de Policía explican: «De un tiempo hasta ahora, se ha politizado cualquier actuación policial, cuestionando y deslegitimando cualquier trabajo policial.. No nos puede sorprender que el mensaje haya calado en parte de la sociedad, que ya no respeta a la policía ni su autoridad».

Desde UFP advierten que, tras la quiebra del respeto de autoridad a la Policía, los ciudadanos serán los más afectados: .»No se confundan, los siguientes serán los ciudadanos, si esto se lo hacen a un policía, qué no harán al resto».

JUPOL: Interior oculta casos

El portavoz del sindicato policial JUPOL, Ibón Domínguez, denuncia que este nuevo ataque no es un hecho aislado, sino un episodio más dentro de una escalada de violencia que se ha desbordado en toda España.

En los últimos días se han producido ataques con armas de guerra, emboscadas a patrullas, tiroteos y agresiones físicas extremadamente graves que han dejado a varios agentes hospitalizados, dos de ellos en estado crítico.

«Recordamos que sólo en 2024 se registraron cerca de 17.000 agresiones a policías nacionales y guardias civiles, una cifra histórica que el Ministerio del Interior sigue sin incluir en sus estadísticas oficiales, pese a ser un indicador directo del deterioro del principio de autoridad y del clima de impunidad que hoy reina en las calles», denuncia JUPOL.