Sociedad
Santoral

¿Qué santos se celebran hoy, sábado 18 de mayo de 2024?

Entre los santos que se celebran en este día, destaca Santa Claudia o San Juan I, Papa

¿Qué santos se celebran hoy, sábado 18 de mayo de 2024? Entre los santos que la Iglesia católica celebra este 18 de mayo destaca Santa Claudia, por lo que todas aquellas niñas y mujeres llamadas con este nombre recibirán hoy una felicitación. El nombre de Claudia parece tener su origen en la gens romana «claudere» que significa Cerrar y es bastante popular en nuestro país con más de 86.000 claudias con una edad media de 18,5 años según datos del INE. Otro día en el que se conmemora este nombre es el 20 de marzo debido a Santa Claudia de Ancira, virgen y mártir.

Junto a Santa Claudia, el 18 de mayo es un día en el que se conmemora a otros santos como San Dióscoro de Alejandría o también  San Juan I, papa. Pero no son los únicos de modo que de estos te contamos su historia y os enumeramos al resto para que conozcáis cuáles son los santos de este día.

Santa Claudia

Santa Claudia es recordada como una valiente virgen mártir que enfrentó la persecución y la opresión debido a sus creencias religiosas. Aunque se sabe muy poco sobre su vida, su trágico final en Ancira, una antigua región de Asia Menor que hoy forma parte de Turquía, ha dejado una huella imborrable en la historia.

Según la tradición, Santa Claudia fue obligada por el gobernador a vender su cuerpo como una meretriz como castigo por negarse a renunciar a su fe. A pesar de la cruel presión a la que fue sometida, ella se mantuvo firme en sus convicciones, negándose a renunciar a sus creencias religiosas. Este acto de valentía y resistencia le valió el reconocimiento de la Iglesia Católica, que la declaró virgen y mártir.

Según los relatos, Santa Claudia fue arrojada junto con otras vírgenes mártires a lo profundo de un lago, con pesadas piedras alrededor de sus cuellos, después de haber sido obligadas a prostituirse. Este acto despiadado no logró quebrantar su espíritu, y su valentía sigue siendo un ejemplo para los creyentes de hoy en día.

San Dióscoro de Alejandría

San Dióscoro de Alejandría fue el vigesimoquinto patriarca de Alejandría, sucediendo a Cirilo en 444. Presidió un concilio en Éfeso en 449, conocido como el Latrocinio de Éfeso, que trató de rehabilitar a Eutiquio. Fue excomulgado por el papa León I por rechazar el Concilio de Calcedonia y afirmar el Miafisismo. Murió desterrado y es considerado santo por la Iglesia copta y las demás iglesias de la Iglesia Ortodoxa Oriental.

Para los cristianos coptos, Dióscoro es un defensor de la fe y un héroe que resguardó la ortodoxia contra los obispos del imperio que se habían vuelto nestorianos. Sin embargo, las Iglesias Católicas y Ortodoxas Griegas lo recuerdan como un tirano en su Sede y un asesino que causó la muerte del obispo de Constantinopla Flaviano en el Latrocinio de Éfeso.

Su cristología, que afirmaba «una sola naturaleza encarnada del divino Logos (Verbo)», fue considerada herética por implicar que las naturalezas de Cristo se confundieran. Aunque Dióscoro protestó que sus enseñanzas eran las de Cirilo y eran la única manera de salvaguardar la unidad de la persona de Cristo, la gran mayoría de los obispos decidieron que dos naturalezas antes de la encarnación y una después no era la fe de los padres ni era teológicamente sostenible.

San Juan I

San Juan I fue un Sumo Pontífice italiano, originario de Toscana, que fue elegido en el año 523. Durante su papado, Italia estaba bajo el gobierno del rey Teodorico, quien apoyaba la herejía arriana, la cual negaba la divinidad de Jesucristo, algo contrario a la religión Católica.

En ese tiempo, el emperador Justino de Constantinopla ordenó el cierre de los templos arrianos en la ciudad y prohibió que sus seguidores ocuparan cargos públicos. Ante esta situación, el rey Teodorico obligó al Papa Juan I a viajar a Constantinopla para interceder a favor de los herejes. Sin embargo, el Papa no mostró interés en apoyar a los arrianos, lo que generó el apoyo de la gente de la ciudad hacia él.

A su llegada a Constantinopla, más de 15,000 fieles recibieron al Papa con gran solemnidad, presidiendo las festividades de Navidad. A pesar de que el emperador Justino devolvió algunas iglesias a los arrianos, no les permitió ocupar cargos públicos. Enfurecido, Teodorico mandó encarcelar al Santo Padre a su llegada a Ravena, donde finalmente falleció a causa de los malos tratos recibidos en prisión. Junto con él, también fueron martirizados sus consejeros Boecio y Símaco.

Los historiadores cuentan que el rey Teodorico experimentó un profundo remordimiento por la muerte de San Juan I, llegando al punto de ver su imagen incluso en los pescados que le servían en el almuerzo.

Otros santos que se celebran el 18 de mayo