Sociedad

Inda: «Los medios han contribuido a limpiar España antes que jueces y fiscales»

Lleva más de veinte años en la profesión que considera «la más divertida y apasionante del mundo» y con sus noticias, muchas tras arduas investigaciones, sus intervenciones en tertulias o dirigiendo el nuevo digital Okdiario, Eduardo Inda no deja indiferente a nadie.

Asegura en una entrevista a Efe que los medios de comunicación han contribuido en los últimos años a «limpiar y adecentar» este país, antes incluso que jueces y fiscales, y que el periodismo de investigación le ha prestado grandes servicios porque es «esencial» en una democracia de calidad.

Inda (Pamplona, 1969) puso en marcha el pasado septiembre Okdiario y no teme que haya un exceso de medios ya que, asegura, habrá «una selección darwinista» y sobrevivirán «los más fuertes y los que mejor lo hagan».

PREGUNTA. ¿Cómo surge la idea de crear Okdiario?

RESPUESTA. La idea surgió cuando todavía estaba en El Mundo, me rondaba en la cabeza hace tiempo. Quería liderar un proyecto y cuando salí el 31 de diciembre del año pasado, acogiéndome al plan de bajas incentivadas, decidí montarlo.

Optamos por la táctica de no hacer ruido porque no quería generar falsas expectativas e ir pasito a pasito, partido a partido como diría Simeone. Al final salimos el 23 de septiembre que era más o menos la fecha prevista.

P. ¿La seña de identidad de este diario digital es el inconformismo como se proclama en su cabecera?

R. Buscamos atraer a personas de todas las edades, especialmente a los jóvenes, a la gente que no se conforma con que este país tenga los niveles de corrupción que tiene, una educación manifiestamente mejorable, casi 5 millones de parados, siga habiendo intocables desde el punto de vista de la justicia, haya indultos a políticos, no haya primarias por ley, los debates electorales no estén incluidos en una ley y sean obligatorios, no haya listas abiertas o los medios de comunicación públicos como RTVE y las televisiones autonómicas estén politizados.

También decimos que somos el sitio de los inconformistas y de la tercera España, la de Ortega, Marañón y de mucha otra gente que no creían en un bando de la Guerra Civil o en otro.

Siempre digo que la Guerra Civil fue de malos contra malos. Estoy harto de que en este país todo se mire por el prisma de según en qué bando estoy. Yo no estoy ni en un bando ni en otro, estoy en el bando de la tercera España, que es lo que quiere representar Okdiario.

P. ¿Hay lugar para tantos medios digitales?

R. El papel es una fórmula maravillosa que me encanta pero creo que desde el punto de vista comercial está agotada, quedará reducida a artículo gourmet. Ahora lo que va a pitar y lo único que tiene salida empresarial es el mundo digital.

Hay muchos medios, habrá una selección darwinista y si lo haces bien sobrevivirás. Van a sobrevivir los más fuertes y los que mejor lo hagan; nosotros aspiramos a eso.

P. ¿Okdiario hará la competencia a El Español?

R. Okdiario será competencia de El Español, del ABC, El País, El Confidencial, Vox Populi, Crónica Global… y de todos los medios de comunicación que tienen diarios en internet. Somos competencia de todos, no solo de El Español.

P. ¿Una de las señas de identidad del diario será la investigación?

R. Evidentemente. El periodismo de investigación ha prestado grandísimos servicios a este país porque, si no, no hubiéramos sabido que el yerno del anterior Rey, cuñado del actual, era y es un corrupto; que Jordi Pujol es el mayor ladrón de Europa Occidental; que Ignacio González es casualmente un político multimillonario; que el Fútbol Club Barcelona estafó a sus socios y a todo hijo de vecino en la compra de Neymar; el caso Púnica; o el tema de los sobresueldos y financiación irregular del PP.

El periodismo de investigación es esencial en una democracia de calidad y, desde luego, nosotros lo vamos a potenciar.

P. ¿Con internet estamos mejor informados o hay una sobredosis?

R. Internet ha hecho que las sociedades sean mucho más libres. Hoy en día un político no puede ocultar nada; antes los políticos o el poder lo tenían muy fácil, llamaban al director de un periódico, de una televisión y de dos radios y acallaba cualquier información. Hoy con internet es imposible.

Ha disparado exponencialmente la universalización de la democracia y las sociedades en las que internet funciona de manera libre es muchísimo más libre que lo era hace diez años y no digamos hace cincuenta.

Personajes como el dictador tunecino Ben Alí, el gran faraón de Egipto de los siglos 20 y 21 Mubarak o Gadafi en Libia cayeron por las redes sociales. Internet ha sido una revolución en todos los ámbitos y desde luego es también una revolución democrática.

P. ¿Hay ahora una sobreexposición de los políticos? ¿Qué opina sobre que hayan perdido el miedo a la televisión?

R. Me parece bien que muestren su faceta personal, es bueno para conocer cómo son de verdad. Pero me gusta por encima de todo que los políticos nos digan qué propuestas tienen para mejorar este país, que tiene mucho margen de mejora.

Pido a los políticos que más que sepan bailar y mostrar su lado humano, que es un avance tremendo en la democracia española, nos digan qué van a hacer con España en los próximos cuatro años y lo expliquen, se comprometan y firmen un contrato con los españoles y, si no lo cumplen, podamos mandarles a su casa.

P. ¿Cuál es el estado de salud del periodismo en España?

R. Desde el punto de vista de la financiación es complicado por la situación económica, aunque ya está mejorando de forma muy patente. Los medios han padecido el mismo problema financiero que cualquier otro sector.

Pero desde el punto de vista periodístico estrictamente ha sido bueno porque los medios han contribuido en los últimos años a limpiar y adecentar este país, antes incluso que jueces y fiscales.

P. ¿Qué consejos daría a un periodista que empieza?

R. Hay que trabajar mucho, ser muy tenaz, hipercrítico, no casarse nunca con el poder establecido. Les diría, como una realidad que he contestado durante los 23 años que llevo, que es la profesión más divertida y apasionante del mundo.